El uso de programas on-line y, más recientemente, de aplicaciones móviles con la intención de bajar de peso o de ponernos en forma es cada vez más frecuente, sobre todo entre el público joven femenino, que suele ser el target de este tipo de apps.
Ahora bien, ¿son adecuadas estas aplicaciones móviles a la hora de bajar de peso? ¿Pueden ayudarnos en el proceso de adelgazar de forma saludable? Hemos pasado un mes utilizando la app de nutrición de Emily Skye que, con 2,4 millones de followers en instagram y un imperio del fitness valorado en 32 millones de dólares, según el Daily Mail, es una de las instagrammers más conocidas (quizás la recordéis por su defensa del body positive tras su embarazo y por ser la entrenadora de Khloé Kardashian y colaboradora en su línea de ropa para todas las tallas). Estos son los errores y aciertos de su app de entrenamiento y dieta.
Al igual que Emily, muchas de las estrellas del fitness de instagram han optado en los últimos tiempos por desarrollar programas de entrenamiento y nutrición accesibles a través de apps que podemos descargar en nuestros teléfonos móviles. Este es el caso, entre otras, de fitness influencers como Kayla Itsines (en Vitónica analizamos hace tiempo tanto su programa de entrenamiento como su programa de nutrición) o Anna Victoria, dos de las más famosas instagrammers de fitness a nivel global.
Cero personalización, que debería ser la base de una nutrición saludable
Descargamos la aplicación (disponible en Android e iOS) y, después de un registro sencillo en el que solamente se nos solicita un nombre, una dirección de mail y el año de nacimiento, la app nos pide que seleccionemos uno de los planes de suscripción de la app. El más sencillo es el plan mensual, que nos ofrece acceso a los planes de comida y de entrenamiento por un precio de 13,49 euros y además nos da una semana gratis.
Después de seleccionar el plan con el que deseamos acceder (mensual, trimestral o anual) ya podemos acceder a la app y comenzar a visualizar tanto los planes de comida como los planes de ejercicio (todo el contenido está en inglés).
Lo primero que llama la atención, sin lugar a dudas, es la escasa, prácticamente nula, personalización de los planes de nutrición. Las únicas preguntas que nos hace la app es si somos hombre o mujer, si deseamos obtener un plan especial para personas alérgicas al gluten u otro para vegetarianos y si queremos bajar de peso (sin ninguna pregunta más) o ganar fuerza.
No nos preguntan ningún dato sobre nosotros, aparte de nuestra edad: ni nuestra altura, ni nuestro peso, por supuesto cero alusiones a nuestra masa muscular u otro tipo de medidas que son necesarias para realizar un plan personalizado. Tampoco encontramos nada relativo a nuestro nivel de actividad física o a cuáles son nuestros objetivos.
Lo que encontramos en la app son diferentes recetas, bien explicadas y con muy buena pinta, eso sí, que se nos sugieren para el desayuno, la comida y la cena. También podemos obtener recetas para realizar snacks saludables diarios.
Si no conocemos cuáles son los objetivos de la persona que está utilizando la app, aunque sea de forma vaga (perder cinco kilos en tres meses, mantener nuestro peso actual, perder 10 kilos en seis meses) es imposible que las recetas que sugiere la app nos acerquen a nuestro objetivo.
A la hora de ponernos en forma o de perder peso es absolutamente necesaria la personalización tanto de la dieta como del entrenamiento: conocer los objetivos de cada persona, así como sus datos personales y hábitos alimentarios. El plan que te sirve a ti no sirve para otra persona, aunque tenga los mismos objetivos de pérdida de peso o de puesta en forma, porque no partís del mismo punto y tenéis necesidades diferentes.
Un montón de recetas que puedes aprovechar para tus comidas, y buenos entrenamientos para comenzar a ponerte en forma
¿La parte buena de la app? Sin duda, la inmensa cantidad de recetas que pone a nuestra disposición. A pesar de que la propia app nos propone tres recetas diferentes cada día (para las tres comidas principales), podemos cambiarlas a placer con la condición, según nos informa la aplicación, de que las cambiemos por otras del mismo tipo: ensalada por ensalada, pescado por pescado, etc.
Las recetas son saludables y sencillas: contienen las cantidades que necesitamos de cada ingrediente para preparar al menos dos raciones completas de cada comida "fuerte" (en ocasiones hasta cuatro), por lo que es perfecta para preparar comida para nosotros y para nuestra pareja, o incluso para guardar las sobras para el día siguiente. En el caso de las recetas del desayuno, las raciones son siempre individuales.
Cada día, además, la app nos sugiere un entrenamiento diferente: estos entrenamientos pueden hacerse tanto en casa como en el gimnasio (nos da alternativas para los dos ámbitos) y duran alrededor de 20 minutos. Para todas las sesiones de entrenamiento vamos a necesitar cierto equipamiento como mancuernas, fitball o kettlebells.
Los entrenamientos, que son bastante completos, suelen estar destinados a una zona concreta del cuerpo (brazos, piernas, glúteos), incluyen un calentamiento y una vuelta a la calma y podemos ver en vídeo cada uno de los movimientos que tenemos que hacer. Por ese lado, la aplicación puede ser muy útil y clara.
Al contrario de lo que puede ocurrir con los entrenamientos de Kayla Itsines, que cuentan con ejercicios que pueden ser sumamente complejos para personas que no han entrenado nunca, los entrenamientos de Emily Skye sí son más accesibles para todos. Lo único que debemos tener en cuenta es que, sobre todo durante los primeros días, es muy importante que nos centremos en perfeccionar la técnica para evitar así posibles lesiones. Una vez dominada la técnica podremos pasar a incrementar la intensidad de los entrenamientos.
La app de Emily Skye para ponernos en forma: la opinión de Trendencias
¿Merece la pena descargar esta app y pagar por su plan nutricional y de entrenamiento? En cuanto al plan nutricional tenemos muy claro que no: mucha mejor inversión es acudir a un profesional de la salud, un dietista-nutricionista, que pueda evaluarnos de manera personal y nos ayude de esta manera a llegar a nuestros objetivos.
El plan de entrenamiento sí parece más atractivo y mejor planificado que la parte nutricional. El hecho de tener un entrenamiento ya marcado y preparado para nosotros cada día puede ayudarnos a cumplir con nuestro plan de forma efectiva. Eso sí, hay que tener claro que, además de invertir en la aplicación también tendremos que hacerlo bien en una suscripción a un gimnasio o bien en el equipamiento necesario para poder realizar los entrenamientos.
Imágenes | Emily Skye app, Instagram de Emily Skye
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario