Opuestas, complementarias e impresionantes. Kate Hudson y Anne Hathaway nos ofrecían ayer el primer gran momento alfombra roja del año. Y lo hacían en Nueva York, súper sonrientes, bellísimas hasta decir basta, y de la mano. Dejando atrás la enemistad a la que hacen frente en la película que estaban presentando, Guerra de novias, en la que ambas, amigas del alma, eligen el mismo día para casarse y “rompen peras”.
Kate Hudson, estaba espectacular con un vestido de silueta sirena con estampados geométricos haciendo figuras en colores blanco y negro firmado por Oscar de la Renta y perteneciente a su colección de primavera-verano 2009: el colmo de la feminidad y el súmum de la elegancia. Mientras tanto, su compañera de reparto, Anne Hathaway, parecía querer demostrar que se puede ser igualmente delicada enfundada en un tuxedo.
Y conseguía probarlo, porque estaba igualmente guapa y sexy, con su esmoquin a base de pantalón pitillo y blazer de solapa ancha y cruzada, el pelo recogido con una diadema al más puro estilo Audrey Hepburn, las uñas rojas y unos peep toes dorados.
¡Feliz día de Reyes a todos!
Foto | fadedyouth