Cerrando el capítulo del festival de Cannes, que se clausuró anoche tras doce días con la entrega de la palma de oro, volvemos a poner en evidencia a la jurado más elegante que ha pasado por el certamen francés, Natalie Portman, a la que no sé yo si le hace demasiado bien eso de llamar tanto la atención por su vestuario, y no tanto por su papel de juez.
Tras la entrega de galardones de la 61 edición del festival, que premió al gran Benicio del Toro como mejor actor por su papel de Che Guevara, y aprovechando el estreno de la última película de Robert de Niro, What just Happened?, una comedia muy divertida según dicen, Natalie volvió a deslumbrar con un sencillo y clásico vestido bicolor, blanco y negro, a grandes y horizontales rayas, que tiene todos los números para ser obra de Lanvin.
De hecho se parece muchísimo a uno de los vestidos que luce Sarah Jessica Parker en el editorial de este mes de Vogue, aunque tirando de archivo y buscando en las últimas colecciones de la firma no aparece como tal, podría pertenecer sin embargo a la colección de invierno, porque cuenta en su haber con varios vestidos rayados, y sería una pieza especial. Ya se sabe que muchas veces los diseñadores modifican especialmente algunos de sus vestidos base, a petición de sus clientas.
La protagonista de Las hermanas Bolena no estaba sola, la acompañaban una recuperadísima Milla Jovovich, en azul turquesa, que se dice que iba de Versace Atelier, aunque el vestido, como el de Natalie, no consta en la colección, y desde luego no es el mismo que lució Eva Longoria en los inicios del festival, y Kerry Washington, en color gris perla. Ambas muy guapas.
En trendecias | Milla Jovovich y Lou Douillon en la premiere de Palermo Shooting en Cannes Vía | thefashionspot
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