Riccardo Tisci vuelve a presentar a una colección que recuerda la última del otoño-invierno 08/09, muy gótico chic, pero con grandes influencias del Lejano Oeste. El cuero negro se mezcla con perneras vaqueras y las camisas blancas con cuellos alzados se decoran con cintas doradas a modo de los sheriff.
Lo más interesante de la colección han sido los tops hechos con tiras, más del tipo dominatrix que de las bandas estilo años 80 de Hervé Léger. Los juegos con transparencias, que se asomaban por debajo de telas cortadas con formas sinuosas, o con vestidos con doble capa e incustraciones también ha sido de lo mejorcito de lo visto en la pasarela.
No han faltado sobre la pasarela las camisas abullanadas negras, los little black dress de manga larga y los pitillos de cuero negro que hicieron que la anterior colección prêt-a-porter de Givenchy fuera todo un éxito. Por eso las asistentes al desfile han acudido todas con sus prendas favoritas de la colección otoño-invierno.
Con tanto color negro y tanto cuero, el único indicio de que se trata de una colección para primavera-verano son los minivestidos de un blanco nuclear y algunas piezas en delicada tela beis. Por cierto, que aparecen aquí también las mallas de ciclista, habrá que estar atentas a esta tendencia.