La brutal honestidad de una mamá contando qué se siente al dar a luz que se ha hecho viral en Facebook

En el mundo de las redes sociales es Mummy Mumbles, pero en la vida real se llama Becki Pope, acaba de tener un bebé y todavía en estado de shock ha publicado una lista con las "Veinte cosas que nadie te contó sobre dar a luz un bebé" que lleva más de 78.000 compartidos.

Y lo más importante, una lista que ha conseguido empatizar con miles de mujeres gracias a una sinceridad sin frenos y a mucho sentido del humor.

Desde tener que hacer pis delante de desconocidas a tener la sensación de que tu bebé te odia. Nada ni nadie te prepara para ese huracán de sentimientos que es la maternidad. Bueno, la verdad es que nadie te cuenta nada de lo que va a pasar después. Es como si, tras nueve gloriosos meses de embarazo, el rótulo The End apareciera en la sala de partos y todos anticipáramos el final feliz que está por llegar.

Pero las mujeres que ya han sido madres saben que eso no es así en realidad. La maternidad está llena de momentos maravillosos, sí, pero también de terribles, horas de desamparo, tristeza y desesperación, falta de intimidad absoluta, de no entender qué está pasando e intentar comprender por qué nada es como en los anuncios de la tele. De emociones inexplicables.

Algo así debió pensar Becki, que ha intentado contar desde ese punto terrorífico y chocante de vista (que podéis leer aquí) lo que significa convertirse de repente en madre. Empezando desde esas primeras horas en el hospital, el eco de los dolores del parto, las dificultades para ir al baño o para charlar con un guapo doctor sobre tetas hinchadas o la primera ducha que "podría ser una escena de la película Carrie".

Becki tampoco se pone censuras a la hora de hablar de la realidad del cuerpo de una mujer tras el parto: "tu estómago ahora parece un globo que se está desinflando lentamente y siente mucha pena de sí mismo". O a la hora de comparar a su bebé recién nacido con una réplica de Eduardo Manostijeras, que atentará contra su propia cara recién estrenada sin dudarlo un segundo.

Lo bueno es que su post termina con una muy positiva reflexión sobre cómo piensa ella que deberíamos adaptarnos a estas primeras horas como madres: "deja de preocuparte. No eres superwoman. No existe una cosa llamada normalidad... ni perfección. Tú y tu bebés sois normales..." Poco podemos hacer frente a este caos repentino salvo, según Becki, dormir todo lo que nos dejen. E intentar no comparar a nuestro bebé con un viejo muy arrugado de color púrpura, claro.

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