Es la autora de El cuento de la criada y Alias Grace, dos de las novelas, reconvertidas en las series de televisión que han triunfado tanto con la crítica como con el público, y que más nos han hecho reflexionar sobre las conquistas sociales de las mujeres y lo mucho que queda por hacer para conseguir la plena igualdad de derechos.
Pero estos últimos días, esta misma eterna aspirante al Nobel que tanto nos ha inspirado, ha sido acusada de mala feminista por sus comentarios en torno al movimiento #MeToo y especialmente por un artículo de opinión publicado el pasado sábado en The Globe and Mail, donde califica al movimiento #MeToo de "un síntoma de un sistema legal roto", pero también habla de una caza de brujas.
La escritora que ha reavivado el debate feminista en el 2017
"Tras las recientes elecciones en los Estados Unidos, proliferan los miedos y las ansiedades. Se da la percepción de que las libertades civiles básicas están en peligro, junto con muchos de los derechos conquistados por las mujeres a lo largo de las últimas décadas, así como en los siglos pasados".
Son palabras textuales de la escritora Margaret Atwood, un texto que hemos entresacado de la última edición de su novela El cuento de la criada, una distopía que se desarrolla en un futuro Estados Unidos donde los derechos de las mujeres se suprimen y se instaura un régimen patriarcal basado en extremos valores puritanos con el objetivo de ofrecer a la población la máxima seguridad posible frente a supuestos ataques terroristas. Una novela que ha reabierto el debate feminista y que este pasado 2017 ha adquirido especial relevancia mundial gracias a su adaptación a la televisión por Hulu (una cosa no quita la otra y hasta nuestros compañeros de Espinof recomiendan leer el libro después de ver la serie).
Por qué le han acusado de ser "mala feminista"
Y sin embargo, desde hace un tiempo Margaret Atwood se está teniendo que enfrentar a la etiqueta de que es una mala feminista por su postura ante el movimiento #MeToo. Y más desde la publicación este pasado sábado del artículo titulado ¿Soy una mala feminista? en The Globe and Mail, donde explica que las mujeres están acudiendo cada vez con más frecuencia a los canales online y redes sociales para hacer acusaciones de acoso sexual porque el sistema legal es poco efectivo. Algo que ella considera una equivocación.
Pero también comenta que en algunos casos el movimiento está yendo demasiado lejos en este aspecto, y alerta sobre los peligros de una posible "justicia vigilante", que en sus palabras podría convertirse en "Una costumbre del linchamiento culturalmente asentada". O en otras palabras, una caza de brujas.
El caso que le ha hecho replantearse ciertas posturas
Precisamente, para explicar su postura mucho mejor, Margaret Atwood habla de un caso concreto que la ha dejado marcada: el caso de Steven Galloway, el máximo responsable del departamento de escritura creativa en la Universidad de British Columbia. Atwood cuenta como en el año 2016 firmó una carta abierta (entre las muchas peticiones que reconoce firmar) llamada Responsabilidad UBC, en la que se pedía considerar a la Universidad que se declarara responsable por su erróneo proceso en el trato de este empleado.
Años antes la universidad se convirtió en el centro de atención de los medios naciones porque hubo una investigación e incluso antes de que se llegara a una conclusión final o incluso se conocieran los detalles concretos de la acusación, Steven Galloway tuvo que firmar un contrato de confidencialidad y todo el mundo, incluida ella misma, se quedó con la impresión de que este hombre era un violador en serie agresivo.
La inmediata consecuencia es que todo el mundo se sintió libre para atacar a este profesional públicamente y debido a que él se había visto obligado a firmar un contrato de confidencialidad se vio acorralado, sin herramientas para defenderse de aquellos ataques. Y tras la investigación y el juicio que se celebró, al final el jurado llegó a la conclusión de que Steven Galloway era inocente, pero eso no impidió que la universidad le despidiera y que siguieran atacando públicamente.
Para la escritora la idea de que alguien como Steven Galloway "es culpable porque es acusado" existe desde "la Revolución Francesa, las purgas del estalinismo en la URSS, el período de la Guardia Roja en China, la dictadura argentina o los primeros días de la Revolución Iraní".
"La sentencia sin juicio es el comienzo de la respuesta a la falta de justicia. O el sistema está corrupto, como en la Francia prerrevolucionaria, o simplemente no hay uno, como en el Lejano Oeste, entonces la gente hace justicia por mano propia", es su conclusión y lo que defiende en el artículo.
Conectar el movimiento #MeToo con una caza de brujas o un linchamiento en las redes sociales es una de las razones por las que a Margaret Atwood se le ha calificado de "mala feminista" y por su reacción al día siguiente en Twitter, el mismo artículo donde justifica por qué opina cómo opina respecto al movimiento y las razones que le llevan a hablar de linchamientos públicos, sus palabras no han debido gustar y no ha parado de recibir críticas vía esta red social. La autora, que es tremendamente activa en las redes sociales (especialmente con su cuenta de Twitter) ha tenido que defender su postura con más de 30 tweets lanzados este domingo. Tweets como estos:
Tomándome un respiro de ser una Diosa Suprema, omnisciente, omnipotente y responsable de todos los males. Lo siento por haber fallado al mundo sobre la igualdad de género. ¿Quizá paro de intentarlo? Volveré más tarde (en una encarnación, quizá).
Gracias. Pensé que tu artículo más reciente en Guardian era muy equilibrada. Las leyes y las instituciones necesitan responder a esta llamada, y procesar -esperemos- para asentarse en algo más imparcial para todo el mundo. Pero como rechacemos la idea de que sea imparcial para todos a la vez se acaba el juego.
Esto no es lo que dije en el pasado. Yo dije "¿qué tipo de feminista?". Dime qué estás tratando que firme y te diré si estoy de acuerdo con ello. Hay un montón de feministas consideradas e imparciales.
Si hay algo que queda claro, es que al final de la columna Margaret Atwood afirma que la patriarcado necesita para su supervivencia que haya división entre las mujeres y que las mujeres tienen que luchar contra esa división y permanecer juntas para que eso no suceda.
Foto| Wikipedia Commons
En Trendencias| Margaret Atwood es la escritora del año: ¿qué podemos leer (o ver) de ella?
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario