La silla Barcelona es una de las piezas de mobiliario más icónicas de las últimas décadas. Diseñada en el año 1929 para el pabellón alemán de la Exposición Internacional de Barcelona, se ha convertido en una de las obras más conocidas del arquitecto y diseñador Mies van der Rohe. Pero lo que mucha gente no sabe es que la silla Barcelona no es obra de Mies van der Rohe. No solo. En realidad, la autoría es suya y de Lilly Reich, su socia y una de las pocas figuras femeninas que formó parte del movimiento de la Bauhaus.
Pero ¿quién fue Lilly Reich? Tras empezar su carrera en el mundo del diseño de moda, pronto se pasó al mobiliario y, antes de cumplir los treinta, ya tenía su propio estudio. En 1924, conoció a Mies van der Rohe, con quien formaría pareja profesional durante más de diez años, una aventura que dio como resultado más conocido las piezas de la colección Barcelona (además de la silla, hay un diván, una otomana y una mesa). Durante la Segunda Guerra Mundial, ella fue la encargada de conservar a las afueras de Berlín la colección de dibujos de Mies van der Rohe, que hoy se exponen en el MoMA.
En el mundo del diseño, siempre se ha especulado con la responsabilidad que cada uno de ellos tuvo en el diseño de la silla Barcelona. Mientras unas partes mantienen que ella pudo ser la verdadera autora o, como mínimo coautora del diseño al mismo nivel que van der Rohe, y que la historia la ha ninguneado como en tantos otros casos de mujeres que fueron eclipsadas por compañeros varones, lo cierto es que, de forma oficial, Knoll, la empresa propietaria de los derechos de autor y que comercializa la silla por unos 5.000 euros, solo reconoce la autoría de Mies van der Rohe.
Imágenes | Wikimedia Commons.
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