Esos cuerpos desnudos o a medio vestir siempre han sido motivo de inspiración, sobre todo para la escultura, la pintura, la literatura, la fotografía o el cine. Hacia mediados del siglo XX, debido a que la censura todavía seguía estando muy presente, algunas revistas se atrevieron a mezclar los géneros artísticos con los eróticos. El Surrealismo fue, sin duda alguna, uno de los períodos más creativos ya que la composición fotográfica obedecía sólo a sus propias reglas, lo que permitía unas puestas en escenas de lo más etéreas, en blanco y negro.
Los fotógrafos buscan en estos desnudos la expresión del estatismo de las formas del cuerpo femenino y la evocación de la sensualidad, mientras se divierten jugando con la luz, natural o artificial. La clave está en acercar estas puestas en escena a sugestivos sueños oníricos tan valientes como bizarros.
Steven Meisel
Desde hace muchos años, Steven Meisel ha sido, y sigue siendo, el niño bonito de Franca Sozzani, la directora de la edición italiana de la revista Vogue, por lo que es habitual que firme muchas de las portadas de esta mítica cabecera. Aprovechándose de su condición, Meisel crea a menudo puestas en escenas la mar de controvertidas donde las modelos aparecen en composiciones de fuerte contenido erótico.
Sus imágenes, a pesar de causar un fuerte revuelo mediático, o precisamente por eso, han sido su mejor carta de presentación, de resultas de lo cual ha firmado campañas publicitarias para firmas tan importantes como Versace, Valentino, D&G, Calvin Klein o Prada. En el año 1992, Madonna y el fotógrafo Steven Meisel desencadenaron un escándalo sin precedentes con la publicación de un libro de fotos eróticas al que titularon SEX, pero ya el año anterior publicó un editorial de moda en la edición italiana de la revista Vogue a la que titularon White Winter que era pura dinamita.
Steven Klein
Steven Klein es un fotógrafo neoyorquino que se hizo famoso no sólo por haber trabajado con Madonna o Britney Spears sino porque sus clichés muchas veces han sido catalogados como subiditos de tonos o hard, que es como se los suele calificar en el argot. Uno de sus trabajos que más dieron que hablar fue el de la campaña publicitaria para el lanzamiento del perfume Fame de Lady Gaga. En el vídeo clip de promoción aparecía la cantante como si fuese la Maja Desnuda rodeada por toda una armada hombrecitos diminutos. Las imágenes, bastante oscuras, desprendían erotismo y bestialidad a partes iguales. La misma Lady Gaga dijo que había pedido al fotógrafo que las imágenes fuesen muy sexy y un poquito “cochinotas”.
Richard Avedon
La figura de la serpiente despierta un encanto hipnótico que subyuga por su extraña manera de moverse creando una magia que fascina sobre todo a los fotógrafos. Su silueta ondulante evoca lo secreto, lo sagrado y un viaje espiritual en el tiempo. Símbolo del vicio, del pecado y de la debilidad, alimenta tanto las metáforas como los fantasmas. Enrollada alrededor del cuello de las bellas desnudas, se convierte en un objeto erótico.
Prueba de ello es la foto que Richard Avedon le hizo a Natassja Kinski en Los Angeles en el año 1981, y que ha sido reproducida recientemente por la revista Vanity Fair en la persona de Jennifer Lawrence.
Ellen Von Unwerth
Ellen Von Unwerth es una de las fotógrafos de moda más famosas gracias a sus clichés de alto contenido erótico que podemos ver en las campañas publicitarias realizadas para Chantal Thomas. En ellas mezcla la sensualidad, la feminidad, el romanticismo, el fetichismo pero también un cierto sentido del humor.
Al controlar a la perfección el arte de sacar al mejor partido posible a las mujeres, ha sabido presentar en todo su esplendor a los iconos femeninos más sexy de nuestra época (Monica Belluci, Dita Von Teese, Vanessa Paradis).
David Lachapelle
David Lachapelle, muy conocido por los desnudos que hizo a celebrities de la talla de Michael Jackson, Kurt Cobain, Pamela Anderson, Madonna, o Paris Hilton, ha dado también prueba de gran erotismo onírico en la campañas publicitarias que ha firmado para marcas como H&M en la que reconocimos a Mary J. Blige, Gus Carr y Tamyra Grey en una reinterpretación de Romeo y Julieta; o en aquellas otras para Motorola o Sky Vodka en las que participaron Christina Aguilera o Milla Jovovich, pero las que realmente dieron mucho que hablar fueron la campaña para Happy Socks en la que aparecían tres bailarines, completamente desnudos, luciendo sólo llamativos calcetines, y la campaña "What did you expect?" en la que una sensual Uma Thurman posaba para Schweppes.
William Klein
William Klein es un fotógrafo francés de origen americano que también es pintor y director de cine. En el mundillo se le conoce como Bad Boy. Junto con Richard Avedon fue uno de los fotógrafos que trabajaban en nómina de la revista Vogue. Su trabajo como fotógrafo contrasta con todo lo que se había hecho hasta la fecha, pero al ser tan innovador, su trabajo suscita violentas reacciones. Para Klein la fotografía tiene que hacer reaccionar, la realidad hay que vivirla con subjetividad y mostrar siempre como es: en ocasiones molesta, en otras violenta. Lo cierto es que supo dotar de un toque más moderno a las fotos de moda.
Después de la desbandada ideológica de mayo del 68, se impone la evidencia de que Francia merece una corrección en toda regla. Una auténtica lección de libertad. Mediante una sátira divertidísima del imperialismo americano, la serie Mr. Freedom acaba con las ideas preconcebidas en lo relacionado con las películas de espionaje y con las de héroes bajo los augurios de un tratamiento Pop Art de lo más irreverente. William Klein fue el encargado de desmitificar América.
Helmut Newton
Helmut Newton dedicó gran parte de su carrera a la realización de fotos de moda para la edición francesa de la revista Vogue, trasladando a la foto la belleza perfecta de las modelos con sentido del humor y con arrogancia. Icono newtoniana, la actriz Catherine Deneuve posó frente al objetivo de Helmut Newton encarnando el lujo, la clase y la voluptuosidad. En 1975, Newton sacó la moda de los estudios para inmortalizar el smoking de Yves Saint Laurent en la rue Aubriot del viejo París.
Poderosas, seductoras y dominantes, así son las mujeres de Newton ya que, en su opinión, éstas se han hecho con el poder, evolucionando en un mundo de lujo y de refinamiento extremo. El final de los años 70 marcó un giro en la carrera de este fotógrafo que los críticos calificaron de "porno chic". Newton se alejó de la foto de moda para explorar una fotografía más clásica habitada por mujeres fuertes que recordaban a las valquirias. En el 2012, el Grand Palais de París dedicó una exposición a este sulforoso fotógrafo, desaparecido en el 2004, en la que pudieron verse 200 maravillosos clichés. La obra de Newton parecía querer restituir la belleza, el erotismo, el humor, en ocasiones hasta la violencia que su sensibilidad le permitía desvelar por medio de las relaciones sociales que frecuentaba: la moda, el lujo, el dinero y el poder.
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