Alma Aguilar regresa a Cibeles con una colección delicada, dotada de intemporalidad, que evoca el reencuentro en busca de la belleza esencial y la perfección de siempre. Tejidos muy ricos en texturas y de calidad exquisita. Muchos de los diseños están sacados de archivos y Alma Aguilar los ha reinterpretado en serie limitada.
Jacquard en muselina de seda, gasa de seda labrada, seda flocada, gabardina de seda y algodón, crepé son los materiales esenciales. Vestidos delicados, retro, románticos, de apariencia sencilla. Cinturas muy marcadas con cinturones y faldas globo. Mucho vestido, sin duda la pieza principal de la colección, como en casi todos los diseñadores. Unos diseños muy ponibles y elegantes. Me ha encantado.
Colores sin límite, siempre empolvados y con aire antiguo. Brillo y mate, lisos y estampados, toques dorados, algunos lunares y ciertas rayas que dibuja la prenda y crean efectos ópticos especiales.
Vía | Vogue España Sitio Oficial | Pasarela Cibeles