La colección Primavera-Verano 2007 de Andrés Sardá está inspirada en la India actual. Según el diseñador "se organiza una gran fiesta en los salones de un palacio antiguo y mujeres se visten para la ocasión dejándose influir por el mágico ambiente que se respira, y sabiendo que disfrutan de una velada única y muy especial".
Un desfile mágico, sexy, elegante, lleno de color y sensualidad, como el verano que nos espera. Una gran variedad de bikinis, triquinis y bañadores. Vaporosas túnicas estampadas inspiradas en la India clásica, a juego con los bañadores, para ir pefecta a la playa. Piezas minúsculas, en ocasiones bikinis brasileños, que se combinan con faldas y túnicas de gran vuelo, de mucha caída y largas, como si se tratara de maravillosos vestidos de noche para fiestas especiales en la orilla del mar. En una palabra: espectacular. Me ha encantado y no sólo porque es un desfile distinto, sino por el maravilloso trabajo realizado por el diseñador y la puesta en escena.
Los tops se adornan con cadenas doradas llenas de piedras semi preciosas como el jade, el ámbar o el cristal de roca. Mucho dorado en los complementos: pulseras, collares, broches y sandalias, por cierto, muy chic y elegantes.
Vía | Vogue España Sitio Oficial | Pasarela Cibeles