Últimamente no haces más que oír hablar de los bitcoins, pero como si te estuvieran explicando lo del Bosón de Higgs o la espectacular forma de aparearse de la babosa banana... En todos los casos pondrías la misma cara de "no me estoy enterando de nada".
Encima, el tema acapara cada vez más la atención de los medios de comunicación y hasta has escuchado a alguno de tus amigos más enteradillos que los bitcoins fueron la inversión más rentable del 2017. ¿Cómo es posible que tú no sepas de qué va? Eso sí que no.
Y es que, efectivamente, se consideran la moneda del momento y, lo más importante aún, del futuro. Pero si no terminas de entender qué son, cómo funcionan, para qué sirven o cómo se compran, que no cunda el pánico porque hemos preparado una guía sencilla y rápida (aclaremos: para dummies) sobre todo lo que hay que saber sobre esta moneda.
Para empezar: ¿qué es exactamente un bitcoin?
Oficialmente los bitcoins nacieron en el año 2009 y su creador es todo un misterio: se llama Satoshi Nakamoto, es una de las personas más ricas del mundo según podemos leer en este artículo de Xataka y nadie sabe absolutamente nada sobre él. A él le debemos la existencia de los bitcoins y de su funcionamiento.
Hemos consultado con un experto, que lleva un tiempo comprando bitcoins y atento a los movimientos de este fenómeno, que nos ha explicado que para entender qué son las criptomonedas como los bitcoins tenemos que partir de qué es el dinero tal y como lo conocemos y en qué se basa. "El dinero vale básicamente porque todos nos hemos puesto de acuerdo en que valga y hemos dado una exclusividad a los estados para emitir dinero. Hasta principios del siglo XX las monedas se sustentaban por reservas de oro, pero esto dejó de ser así desde mediados del siglo XX y ahora se basa en la confianza de las personas y en cómo va la economía".
En definitiva, los bitcoins funcionan también de la misma manera que el dinero tal y como lo conocemos hoy, basándose en la confianza y aceptación de la moneda que poco a poco se va poniendo en circulación. Un tipo de moneda digital que sirve para cambiar bienes y servicios, aunque, como nos aclara nuestro experto "técnicamente los bitcoins sirven para comprar e intercambiar cosas, pero ahora mismo no es práctico pagar con ellos porque han subido muchas las comisiones, aunque se espera que la cosa baje. Sí que cumple la función que tiene el dinero de almacenar el valor, aunque tiene el problema de que es muy volátil y oscilando tanto no puede ser considerado como una referencia del valor de las cosas".
El sistema blockchain es una de las claves del éxito de los bitcoins. O cadena de bloques en castellano. Se trata de una base de datos, un libro de contabilidad, del que todos los que participan en la red guardan una copia. El éxito de esta tecnología está en el consenso: si todos tenemos la misma información, esa información es verdadera e imposible de duplicar, falsificar o cambiar.
Para terminar este acercamiento básico, saber que los bitcoins tienen una unidad fraccionaria de medida que se llama satoshi, en honor a su misterioso creador. Un bitcoin son 100.000.000 satoshis. Quizá no tengas suelto suficiente para comprarte un bitcoin, pero puedes presumir de que eres el orgulloso propietario de un puñado de satoshis.
¿Qué tienen los bitcoins de especial? ¿Cuáles son sus ventajas?
Al revés que la moneda que con tanto esfuerzo ganas cada mes, los bitcoins no están controlados por ningún banco, institución financiera o empresa y gracias a eso se puede usar a nivel mundial, ya que no pertenecen a ningún Estado o país, lo que es muy práctico cuando se te da fatal cambiar de libras a euros en una tienda de Asos en Londres, por poner un ejemplo.
Al no existir ningún agente externo mediador, las transacciones en bitcoins se hacen de persona a persona y las comisiones de esas transferencias son muy bajas. De hecho, que no haya mediador también te sirve para ahorrar en tarifas por pagos online o por cambio de banco, por poner algunos ejemplos. Eso sí, esas transferencias son irreversibles. Una vez que mandas el dinero no hay vuelta atrás.
Otra de las grandes ventajas de tener bitcoins es que cuentas con la seguridad de que el dinero es 100% tuyo y nadie puede congelar tus cuentas.
Es digital, es facilísimo y muy rápido de intercambiar.
Es fungible, vale lo mismo en todas partes del mundo.
Además, no pueden ser duplicados o falsificados debido al sistema de cifrado empleado.
Eso sí, seguro que has leído mucho sobre que los bitcoins garantizan el anonimato y no es del todo cierto. Este tipo de criptomoneda garantiza la protección de tu identidad, una ventaja en todos los sentidos, tanto a nivel personal como si quieres hacer negocios porque siempre conservas tu privacidad. Eso sí, la policía puede rastrearlo.
¿Es fácil comprar bitcoins?
Bastante, la verdad. Como cualquier tipo de cambio puedes comprar bitcoins con euros, dólares o la moneda que utilices usualmente. Eso sí, su cotización es muy inconstante y fluctúa muchísimo de un día para otro. Tienes que tener en cuenta que su mercado está activo las 24 horas y los 365 días del año.
El primer paso antes de comenzar a comprar es instalar una app en el móvil o en tu ordenador, como por ejemplo, Coinbase, que te permita llevar un registro de tus movimientos, transacciones y balances en bitcoins.
A continuación, para comprar bitcoins puedes hacerlo directamente desde la misma aplicación de Coinbase o puedes depositar tu dinero real en un servicio de pago online o transferirlo a una cuenta de banco que conecte a compradores con vendedores de esta divisa.
Una vez que haya dinero disponible se hace una orden de bitcoin, como si estuvieras comprando, por poner un ejemplo, un servicio de stock y esa moneda se enviará directamente a tu billetera virtual, un lugar especial donde vas a almacenar tus bitcoins.
¿Dónde puedo guardar mis bitcoins?
Al no existir un intermediario y no funcionar a través de un banco, necesitas una manera de guardar tus bitcoins y no, no vale una hucha de cerdito.
Una de las opciones más recurrentes es hacerse con una wallet para bitcoins o monedero software. Los puedes encontrar en versiones para Windows, Linux, Mac, Android, iOS... Como por ejemplo, Android Wallet.
Otra opción para guardar tus bitcoins es utilizar un monedero web. De esta forma una página web se encarga de guardar nuestras claves y accederemos a nuestras cuentas con un usuario y contraseña. En el fondo es como si pusieras tus bitcoins en un banco y dentro de esta opción puedes elegir diferentes niveles de servicio. Por ejemplo, el servicio lighweight es un servicio recomendado para las personas que desean almacenar sus bitcoins de modo seguro confiando en un servicio externo, pero es el propio usuario quién hace las transacciones y controla el dinero. Y hay opciones más controladas donde el usuario confía plenamente en una plataforma para almacenar sus bitcoins y para hacer las transacciones de forma segura.
Pero tener ese dinero virtual en los mercados de intercambio no deja de tener su riesgo. Puede que esté en peligro ante potenciales ciberataques, robos y misteriosas desapariciones. Una de las soluciones más interesantes para evitar esos riesgos es utilizar un monedero físico o hardware wallet: un dispositivo que ofrece una capa adicional de seguridad y que va más allá de los monederos software.
Y por último, están los monederos de papel, una opción sencilla pero eficaz que consiste en apuntar las direcciones de Bitcoin y las claves privadas asociadas en un pedazo de papel. Si se hace correctamente y el papel se guarda con seguridad y haciendo más de una copia, los monederos de papel son una de las formas más seguras de almacenar criptomonedas, por mucho que nos recuerde al recurso del colchón de nuestras abuelitas.
¿Se puede comprar algo con bitcoins? ¿Una falda? ¿Un viaje? ¿Una casa?
Una búsqueda rápida por internet nos confirma que sí, ya existen muchos sitios en los que aceptan bitcoins como método de pago y algunas aplicaciones y servicios la están aceptando para poder adquirir sus servicios. Por poner un ejemplo, compañías como Microsoft, Paypal y Dell aceptan bitcoins y Tesla acepta este método de pago si te has encaprichado de alguno de sus coches.
El experto que hemos consultado nos ha contado que consiguió comprar con bitcoins en una tienda de productos electrónicos en Japón este verano pasado y nos explica que es muy fácil: "tienes una app donde tienes tus bitcoins y con un código lo pasas por el cajero, te lo encripta y ya está".
Pero dada su inestabilidad todavía tendremos que esperar para que comiencen a sumarse establecimientos y se convierta en un nueva tendencia financiera. Verlo en tiendas es realmente raro de momento, así que de momento olvídate de entrar en Zara con tus recién adquiridos bitcoins o preguntarle a tu frutero a cuántos satoshis está el kilo de tomates pata negra.
¿Son realmente la inversión del futuro?
Sí, no has dejado de leer titulares y titulares sobre las interesantes oportunidades de inversión que hay en este terreno. Pero estamos hablando de que las criptomonedas son impredecibles y se trata de un bien muy especulativo. En otras palabras: es una inversión de riesgo y los expertos nos recomiendan no invertir todo nuestro capital.
Nuestro experto nos recomienda ser cautos. "Como inversión es súper arriesgada. La regla de oro que da todo el mundo que está especializado en invertir en bitcoins es: primero, invierte solo lo que puedas perder, empieza invirtiendo diez euros, cien, algo simbólico. Segundo, cuando ya hayas leído y te sientas seguro con el tema, como mucho, mucho, muchísimo, invierte solo un 1% del total de tu patrimonio".
En resumen, si realmente el tema de los bitcoins te ha picado y te apetece irte acostumbrando a la moneda del futuro, puedes probar con una pequeña suma inicial para ir familiarizándote con el sistema. No, no te harás millonario de la noche a la mañana pero sí te servirá para ir acostumbrándote a ellas y presumir de forma parte de la élite que sabe del tema (aunque solo te hayas leído este artículo, guiño).
Hay más criptomonedas aparte de los bitcoins
Aunque Bitcoin fue la primera criptomoneda y la que más nos suena a todos, ahora nos podemos encontrar muchas más. Sí, qué locura, pero en el fondo no es más difícil que contar con euros, con libras, con dólares,... ¿verdad?
Nos podemos encontrar por ejemplo, con Ethereum, que también utiliza la tecnología blockchain y sobre la que se han desarrollado fenómenos como el de los CryptoKitties o, tal y como se les conoce en español, los "criptogatos", un juego que causa furor en la red y que permite a los usuarios comprar, "alimentar" y especular con las "criptomascotas" usando esta moneda que le hace la competencia al bitcoin.
También nos encontramos con Monero, la criptomoneda preferida si buscas anonimato y privacidad.
Y si ya hay estas alternativas, seguro que en el futuro nos encontramos aún más. Pero hasta entonces al menos nos vamos satisfechos con la lección aprendida.
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