Ellen Pompeo ha conseguido fama mundial gracias a Meredith Grey, el personaje principal de la serie "Anatomía de Grey" al que ella da vida. Tanto la serie, como su trabajo han sido nominados a diferentes premios y, en ocasiones, han ganado. Así que entre la fama, que la ha llevado a ser una de las imprescindibles de las fiestas más fashion, y las galas, en las que hemos visto a Pompeo desfilar sobre la alfombra roja, nos hemos podido hacer una idea de sus estilo. Un estilo sencillo, femenino, sexy en ocasiones, y muy soso en otras.
A su favor Ellen Pompeo tiene que es mona y estilosa, en contra que es extremadamente delgada. La actriz tiene predilección por los vaqueros, los vestidos sencillos y sueltos y por el color negro. Sólo se complica la vida a la hora de vestirse para las fiestas de gala, por eso, cuando los eventos a los que acuden se celebran por la mañana su estilo es muy muy sencillo. Salvo raras excepciones, como este vestido imposible en color burdeos que lució durante la semana de la moda de París (tercera foto del primer bloque).
En cuanto se pone el sol, la estadounidense se esfuerza un poquito más, no mucho, pero se nota la diferencia. Tacones, maquillaje y peinado más eleborados, pantalones en muchas ocasiones y el negro como color favorito, son las claves de su estilo para actos que no exigen una etiqueta muy especial.
Aún así, es sobre la alfombra roja de las fiestas más relevantes donde Ellen Pompeo suele conseguir ser una de las mejor vestidas entre las invitadas, y lo suele hacer con sencillez y elegancia.
La primera vez que la ví fue en la gala de los Globos de Oro del año pasado con un Valentino vintage blanco (primera foto del tercer bloque) y el pelo algo ondulado en un semirrecogido, me pareció una de las más elegantes de la noche. También de blanco, pero esta vez de Versace, acudió a una gala en Mónaco es mismo año, y desde entonces se ha covertido en una de mis favoritas sobre al alfombra roja, pese a su delgadez y a que no siempre acierta con sus elecciones.
Uno de sus vestidos más critícados fue el de terciopelo morado que lució hace unos meses en otra entrega de premios, sin embargo yo no le ví tantas pegas, salvo el peinado que creo que le favorece más cuando no lleva la melena lisa ni se la recoge de forma tirante. Sin duda, el burdeos que llevó a los Screen Actos Gold´s era mucho más feo, y además le quedaba peor. El escote era palabra de honor con forma de corazón, al igual que el morado y uno de su favoritos cuando se viste de fiesta, pero parecía caérsele, y además el color no el favorecía nada.
Más glamurosa estuvo con el vestido negro de volantes que llevó a la fiesta que dió la revista Vanity Fair con motivo de los últimos Oscars, en la que fué de nuevo una de las mejor vestidas.
De todas formas, ha sido el pasado mes de enero cuando Ellen Pompeo ha conseguido llamar la atención de todos con dos espectaculares apariciones: la primera, en los premios SAG, con un vestido de Lanvin precioso (primera foto del quinto bloque), mi favorito de todos los que le he visto, y la segunda, en los Globos de Oro de este año, con un Versace blanco con aires futuristas (segunda foto del quinto bloque) que la convirtió en una de las estrellas más admiradas y posteadas en blogs de moda de todas las asistentes a la gala.
Claro que, como todas las celebrities, también hay días en los que no es ni la más favorecida, ni la mejor vestida, y la reciente gala del Costume Institute fue una de esas noches para Ellen Pompeo (tercera foto del último bloque). Ni el vestido, ni el peinado le favorecía, además ese tipo de escote, que tanto le gusta, resalta lo excesivamente delgada que está. Suerte que ha sabido resarcir el error con el Gucci negro de la última foto, mucho más sofisticado que su estilo habitual, ahora sólo le queda dejar de seguir forzando la sonrisa, que es cada vez menos natural.