Estaba yo haciendo mi “ruta” por las webs de cotilleos para ver si encontraba algo interesante que ofreceros (ya sabéis: esta actriz en tal fiesta o esta cantante vestida de tal diseñador) cuando he dado con la foto que ilustra este post que me ha dejado sin palabras. Afortunadamente, para comunicarme con vosotros no necesito hablar, sino teclear.
La mayoría no entenderéis por qué una foto cualquiera de Jennifer Aniston en el rodaje de su última película me ha afectado tanto. No voy a dejaros un margen para ver quién lo adivina. No estoy para juegos. Estoy muy deprimida.
¿Sabéis por qué me afecta tanto esta foto? Pues porque Jennifer lleva EL vestido de Chloë Sevigny para Opening Ceremony. EL vestido, mi vestido, el que yo quiero y que jamás podré tener porque no puedo escaparme un finde de compras a Nueva York. ¡Ah, Jenni, qué envidia!