Para una copa en La Habana, un crucero por el Nilo o una jornada de compras en la Avenue Montaigne de París este look estudiado pero informal y cómodo, conquista a los hombres más elegantes del planeta.
Sus signos de identidad no son las camisetas de I love NY, ni los pins y mucho menos los pantalones de Coronel Tapioca con la cantimplora forrada en terciopelo verde. Es mucho más que eso. Un look cómodo y moderno al más puro estilo bon vivant.
Trajes de chaqueta en blanco, grises, beige y marrones claros perfectas para combinar con camisas de cuadros, rayas o lisas. La corbata también cumple una función importante en este "outfit"
El fular y el maletín, shopper y demás bolsos de mano masculinos son dos esenciales si quieres ser el centro de todas las miradas paseando por la Vía Montenapoleone de Milán.
El colofón perfecto para esta tendencia sería combinarlo con unas sandalias romanas en color cuero o chocolate. Fresquitas, atrevidas y a la última para pasar una calurosa tarde de verano.