Sobre la nueva jornada laboral: Medidas que sí son eficaces para que todo el mundo salga a las seis

La Ministra de Empleo quiere un pacto laboral para que la jornada laboral se termine a las seis. La idea nos parece estupenda, porque un horario así sí permitiría la verdadera conciliación entre trabajo y tiempo libre. Pero sabemos que esa no es la realidad en nuestro país, y que por mucho que la ley obligue a cumplir cierto horario de trabajo, en muchas empresas se sigue valorando el presentismo por encima de la productividad. Pero hay un rayo de esperanza, y sí hay empresas que se toman muy en serio lo del horario de cierre, con medidas reales para que la gente no se quede en el trabajo "calentando el asiento". Medidas para una efectiva conciliación que deben ir más allá del postureo y ser auténticas.

Apagón de luces

Por ejemplo, en la constructora FCC consideran que la mejor manera de evitar el presentismo en la empresa es apagar las luces, así que a partir de las 7 de la tarde de lunes a jueves y de las 4 de la tarde los viernes, si quieres seguir trabajando en las oficinas de Madrid tienes que pedir un permiso especial. Otras grandes empresas que tienen una jornada flexible envidiable son Iberdrola, BBVA o Endesa.

En esta web dan visibilidad a las empresas del sector tecnológico que se esfuerzan por conciliar. Ojalá ese mapa de empresas cada vez fuera creciendo más y más.

Acabar con las reuniones a horas intempestivas

También se debería acabar con las reuniones hasta altas horas de la tarde. En el Banco Santander, donde ya se ha puesto en marcha el flexiworking, quieren que las reuniones estén bien planificadas para que no sean un pérdida de tiempo, y desaconsejan las reuniones a partir de las 5 de la tarde si se pueden dejar para el día siguiente. Desaconsejar no es precisamente una medida si quieres que se cumpla realmente en toda la empresa.

Flexibilidad de horarios

Otras medidas que permitirían salir antes del trabajo son los horarios más reducidos para comer, en lugar de un parón de dos horas sería más racional comer en media hora o tres cuartos de hora una comida más ligera, y así seguir trabajando para salir antes. Ni más ni menos que equipararnos a lo que hacen en el resto de Europa y América.

Incluso Iberdrola se ha atrevido a dar un paso más y sus 9.000 trabajadores de plantilla tienen jornada intensiva. Trabajan de 7:15 a 14:50 con 45 minutos de flexibilidad a la hora de entrar o salir todos los días del año.

El teletrabajo

Con las tecnologías avanzando a paso de gigante, se puede estar perfectamente trabajando desde casa como si estuvieras en la oficina, totalmente conectado al programa con el que trabaja la empresa. En Repsol llevan años con un programa de teletrabajo que permite trabajar desde casa a través de cuatro modalidades que facilitan la flexibilidad: un día, dos días, 20% de la jornada o dos tardes más el viernes. También nos encanta como funciona Cisco, considerada una de las mejores empresas para trabajar de España, gracias a la posibilidad de teletrabajar y realizar reuniones virtuales.

Aunque la medida que más nos ha gustado para que cuando el reloj marque las seis "y se nos caiga el lápiz" es la de esta empresa holandesa de diseño, que a la seis de la tarde sube las mesas del trabajo hasta el techo. Así el espacio queda libre para que los trabajadores se vayan a casa o puedan recibir clases de yoga. Y hasta el día siguiente.

Fátima Báñez quiere negociar con patronal y sindicatos para poder llevar a cabo medidas que ayuden a la conciliación y la racionalización de horarios. También propone bolsas de horas para que los trabajadores puedan gestionar asuntos propios, mecanismos para flexibilizar la jornada laboral e implementar fórmulas que permitan el teletrabajo.

Aunque sí el gobierno quiere de verdad reducir horarios, debería tomar medidas donde más en serio se lo toman las empresas, es decir en el bolsillo, como multar por alto consumo de electricidad a partir de las 18.15 de la tarde.

Suena todo estupendamente, pero el verdadero cambio se producirá cuando cambie la mentalidad de las empresas y de los jefes, y se valore el verdadero rendimiento y los objetivos conseguidos por encima de "meter horas" sentado en tu puesto de trabajo.

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