Hace poco, os mostrábamos unas fotos que hacían una analogía entre las modelos y los animales. Hoy seguimos con las comparaciones porque, en este caso, no resultan odiosas para nada: los vestidos de las colecciones otoño-invierno 2007/08 se convierten en frescas flores.
Ya os comentamos que en diciembre todas las revistas procuran hacer un número inolvidable. La Vogue alemana no podía ser menos y ha presentado esta estupenda y original editorial de moda firmada por el fotógrafo Alex Lubomirski. ¿No os parece genial?
Si alguna vez os habéis preguntado qué flor sería un diseño de Lanvin, de Giambattista Valli o de Valentino (sí, lo sé, no es una pregunta muy normal. ¿Verdad?) tenéis la solución en el último número de la “Biblia de la moda”, aunque espero que leáis el alemán (o que sepáis mucho de botánica para reconocer las flores) porque, si no, os quedaréis con las ganas.