19 cenas ligeras que están exquisitas, son fáciles de hacer y te ayudarán a dormir mejor en las calurosas noches de verano

Las cenas siempre deben ser más ligeras de las comidas. Para que el organismo no tenga que emprender un trabajo feroz de digestión cuando ya está cansado y para que no nos vayamos pesados a la cama. Especialmente en verano, cuando las temperaturas ya complican conciliar el sueño. Por eso hemos seleccionado nuestras cenas ligeras favoritas, por apetitosas y porque son fáciles de hacer. 

Tortilla de gulas

Esta tortilla viene con muchísimo más sabor que la tortilla francesa tradicional, gracias a las gulas, al perejil y al ajo picado. Podemos hacerla en una sartén redonda para recordarnos a la versión española (aunque esta sea mucho más ligera). 

Ensalada César de brócoli

Los fans de la ensalada César de toda la vida encontrarán en esta receta una propuesta original y más saludable. Porque añadir brócoli aporta muchísimo sabor al plato. Hay que consumirlo crudo o poco hervido para que siga siendo crujiente. 

Pechugas de pollo con limón y hierbas aromáticas

No siempre hacen falta salsas muy elaboradas y consistentes para dar sabor a un plato. Porque esta receta de pechugas de pollo con limón y hierbas aromáticas es refrescante, jugosa y con un toque ácido muy veraniego. En menos de media hora estará lista. 

Calabaza asada con brócoli crujiente, arándanos y almendras

La mezcla de sabores es un festín, especialmente cuando dejas churruscar un poco la calabaza y el brócoli en el horno y después añades los arándanos frescos. Una cena con aires muy originales que es ideal para los días de más calor. 

Espirales de calabacín con vinagreta de sésamo

Si tienes antojo de pasta pero quieres hacer su versión más light, estos noodles de calabacín son la respuesta. Tras cortarlos en espiral deja que escurran todo el agua para después dorar en la sartén con ajo y una buena salsa vinagreta. Puedes añadirles huevo, frutos secos o queso. 

Rodajas de merluza al microondas

Si tienes cinco minutos tienes esta cena ligera, saludable y apetitosa lista para comer. Acompaña la merluza con tomates cortados en mitades y deja que el microondas haga su magia. Ya no hay excusa para no comer más pescado. 

Revuelto de gulas, trigueros y champiñones

Este revuelto tiene todo lo que nos gusta añadir a unos buenos huevos escalfados y revueltos. Las gulas contrastan perfectamente con los champiñones y los espárragos dan esa textura crujiente tan apetitosa. Añádeles salsa de soja para chuparte los dedos. 

Ensalada de remolacha, queso de cabra y arándanos

Las ensaladas no tienen que ser aburridas. Especialmente si sacamos los pies del tiesto y nos atrevemos con mezclas más exóticas y llenas de sabor. El queso de cabra con los frutos rojos son un manjar, pero las rodajas de remolacha fresca son las protagonistas. 

Salmón al horno a baja temperatura

El salmón nos encanta en todas sus variantes y recetas. Pero es un pescado difícil de cocinar, del que hay que estar muy pendiente para que no se seque. Por eso cocinarlo a baja temperatura es una idea genial, porque aunque tardemos más tiempo quedará jugoso y asado. El simple barnizado de sal y pimienta es suficiente para conseguir un plato exquisito. 

Crema Crecy de zanahorias

Si el cuerpo te pide todavía algún plato caliente pero sin que resulte demasiado pesado, esta crema de zanahoria es la respuesta. Para las noches que aún refresca y queramos templarnos pero sin irnos demasiado saciados y pesados a la cama. 

Quinoa con uvas pasas, semillas y verduras caramelizadas

Esta receta vegetariana es ideal para tenerla preparada en la nevera y convertirse en el comodín de esos días que llegamos tarde y solo queremos sacar algo del frigorífico listo para consumir. Una mezcla de quinoa con salteado de verduras al gusto que después se mejora todavía más gracias a las pasas y a las semillas. 

Pastel de cangrejo americano

Esta receta de crab cakes americanos ya ha adquirido fama internacional. Y es que son una forma ideal de consumir marisco sin complicaciones. Incluso se puede convertir en una hamburguesa y comer entre dos panes. Solo necesitamos el aliño, la carne de cangrejo deshebrada y freírlo todo junto. 

Alcachofas con almejas

Ahora que llega el verano unas buenas almejas no nos saltamos ni locos. Pero en versión ligera, acompañadas de alcachofas y cocinando todo en vino blanco con sofrito de ajo, para que el sabor no falte. 

Rösti de calabacín

Aunque parece una tortilla, lo cierto es que este plato está enteramente hecho de calabacín, que ha sido rallado y moldeado para formar este círculo grueso. Es una receta suiza que también puede hacerse con patata y que solo requiere dorar por ambos lados antes de comerse con un acompañamiento al gusto.

Tomates rellenos con verduras asadas y piñones

Comenzamos vaciando unos tomates bien grandes, que servirán de base para esta receta. Los rellenamos de verdura picada: pimiento, calabacín, tomates cherry y champiñones. Todo ello se va al horno durante una media hora para después espolvorear piñones por encima y disfrutar de este plato tan saludable y exquisito. 

Guisantes con jamón

Una receta de siempre que sigue siendo exquisita. Esta la hacemos partiendo de una salsa de cebolla rehogada, jamón en tacos y harina, a la que añadimos los guisantes y dejamos hervir durante ocho minutos para que queden verdes y con su textura explosiva. 

Cintas de calabacín con berberechos

No podría ser más fácil. Solo hay que cortar los calabacines en tiras con una mandolina y cocerlos durante menos de cinco minutos para que queden al dente. Después les añadimos tomates cherry y berberechos enlatados, usando su salsa como aliño del plato. 

Albóndigas de berenjena al horno

Si eres fan de las albóndigas estás de suerte. No solo Ikea nos ha dado todos los secretos de su plato estrella más famoso. También podemos hacerlas en versión veggie con berenjenas, trituradas y hechas bolitas. Acompáñalas con una salsa de tomate casera como el plato de nuestra infancia. 

Berenjenas rellenas de espinacas y atún

Terminamos con uno de nuestros platos favoritos. Y es que no hay nada como convertir berenjenas en barcas y rellenarlas de atún, verdura y queso gratinado. También podemos cambiarlas por calabacín. 

Fotos | Unsplash, Directo al Paladar.