Nueve recetas poco conocidas de la cocina alemana que son más fáciles de preparar que de pronunciar (y los ingredientes los encontrarás en Lidl)

Si dejamos a un lado los estereotipos y abrimos nuestra mente en lo que respecta a gastronomía alemana descubriremos que es mucho más que cerveza, salchichas y chucrut. De hecho, los platos típicos de este país no son nada monótonos y reflejan la riqueza cultural de un país que se divide en regiones muy dispares. Poco tienen que ver las costumbres culinarias de un bremense con las de un muniqués o un sajón. Los estados federados muestran en su gastronomía semejanzas con los países cercanos o las características que impone la situación geográfica. Así, vemos una cocina más típicamente centroeuropea en la zona sur, mientras que en el suroeste es patente la presencia alsaciana francesa.

Eso sí, el recetario germano aún destaca por dar un gran protagonismo a las carnes, tubérculos, verduras de raíz y coles. Tampoco faltan las salchichas (con más de 1.500 variedades), y otros embutidos, así como una gran cantidad de encurtidos. Sin olvidar tampoco el vasto catálogo de panes y derivados con centenares de especialidades locales. Y, aunque es cierto que el pescado sí puede ser anecdótico en muchos territorios, de su pastelería típica salen multitud de postres hoy conocidos en todo el mundo.

Flammkuchen con cebolla morada, queso de cabra y pera

A esta Flammkuchen de crème fraîche con cebolla morada, queso de cabra y pera les gusta llamarla en Directo al paladar “pizza alemana” porque la base es una masa plana de panadería, aunque sea muy diferente a la especialidad italiana. Es típica de ciertas zonas de Alemania, aunque hoy está extendida a todo el país y también se cocina mucho en Suiza.

Tostadas Hawái

Estas tostadas Hawái son una receta ideal para calmar el apetito de los que no saben o no tienen ganas de cocinar. Nació en los años cincuenta en Alemania, cuando la piña en conserva daba un aire exótico a cualquier plato en Europa. Desde entonces sigue siendo un plato nostálgico fácil de encontrar aún en los menús de algunos locales.

Kartoffelpuffer o tortitas de patata

Resulta más fácil elaborar las kartoffelpuffer o tortitas de patata alemanas que pronunciar su nombre. Requieren de ingredientes económicos y que siempre tenemos a mano. Tradicionalmente, se comen solas y acompañadas de compota de manzana. No necesitan de más compañía, pues están deliciosas tal cual. No obstante, se pueden servir como guarnición de carnes y aves: salchichas, estofados, carrilleras, pollo asado o lo que más nos guste. Todo un acierto.

Frikadellen o hamburguesas alemanas

Las frikadellen, las deliciosas hamburguesas alemanas especiadas, tienen muchas recetas con las que prepararse aunque, en general, todas coinciden en usar una mezcla de carne de ternera y huevo, y añadir una mezcla de especias alemanas (que básicamente se compone de pimienta negra, nuez moscada y mejorana en polvo). Una vez formadas, se pueden hacer fritas o cocinadas en el horno a la plancha sin nada de grasa.

Bauernsuppe con Semmelknödel

En la zona alemana de Baviera, Suiza y territorios de Bohemia se pueden encontrar variantes de este plato de sopa campesina con albóndigas de pan o Bauernsuppe con Semmelknödel, todo un ejemplo de cocina reconfortante con alma humilde y hogareña. Un plato contundente y completo perfecto para los días más fríos del año.

Currywurst

El Currywurst es el fast food por excelencia de Alemania, famoso por todo el país aunque originario de Berlín. Consiste básicamente en salchicha acompañada de patatas fritas o panecillo, y con su típica salsa de tomate y curry.

Buñuelos de almendra y canela o mutzenmandeln

En la gastronomía alemana no faltan las tentadoras recetas de dulces fritos como estos Mutzenmandeln, una especie de buñuelos esponjosos con la incorporación de la almendra, deliciosamente aromatizados con canela y limón. Si os gusta la dulcería de sartén, os encantarán estas pequeñas tentaciones.

Käsekuchen

La Käsekuchen o tarta de queso alemana tiene unas características propias que la diferencian de la cheesecake. Normalmente encontramos el uso de quark y schmand, una especie de nata espesa o crème fraîche, sustitutos que podemos usar si no encontramos el lácteo germano. Además no suelen llevar nata y un ingrediente básico es el Vanillepuddingpulver, preparado en polvo para hacer pudding, algo como nuestras natillas. La base puede ser una masa quebrada pero podemos usar galletas trituradas.

Kardinalschnitten o rebanadas de cardenal

Esta dulce receta de kardinalschnitten o rebanadas de cardenal tiene apariencia ligera y elegante. Eso sí, requiere ser elaborado con rapidez para obtener un buen resultado, por eso es aconsejable tener preparadas dos mangas pasteleras y usarlas una después de otra sin demorarse demasiado. En ocasiones se rellena con mermelada además de nata.

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Fotos | Directo al paladar