Los cacahuetes, manís o caguates ocupan en la gastronomía un lugar peculiar. Botánicamente, se trata de una legumbre, pero por la forma de consumo y sus propiedades nutricionales lo consideramos parte de esa gran familia formada por la popular almendra, la dulzona avellana, o las tan cardiosaludables nueces, entre otros. Más concretamente, tradicionalmente, han formado parte de ese grupo de los frutos secos destinados al picoteo y a los aperitivos salados. Sin embargo, en los últimos años, han ganado fama como un producto más versátil e incluso enfocado a la alimentación saludable, ligándose a dietas veganas, fit o deportistas, keto y bajas en hidratos debido a la gran cantidad de nutrientes que concentra. Comercializado bajo distintos formatos, lo que está claro es que tiene un gran potencial en la cocina.
El cacahuete es, básicamente, la semilla comestible de la planta Arachis hypogaea, de la familia de las fabáceas (Fabaceae) o leguminosas (Leguminosae). Por tanto, botánicamente, sería una legumbre (igual que las judías o alubias, las habas, los guisantes y las lentejas, que se desarrollan dentro de una vaina). Hasta la OCU lo confirma y lo explica así:
"Los cacahuetes, en realidad, no son frutos secos: son legumbres, y pertenecen a la misma familia que los guisantes y las lentejas. No obstante, las proteínas que contienen los cacahuetes son muy parecidas en estructura a las de los frutos secos de cáscara".
Propiedades y beneficios del cacahuete
El cacahuete es una pequeña bomba nutricional. En muy pequeñas cantidades, concentran un gran poder energético, macro y micronutrientes esenciales. No obstante, también aporta algunos de los beneficios que asociamos a las legumbres.
Como analiza en Saber Vivir la experta Beatriz Robles, el cacahuete destaca por su alto contenido en proteínas vegetales, hasta un 25-27 % de su composición total, entre 26 y 27 g por cada 100 g de porción comestible. También es muy rico en grasas (43-50 %), sobre todo monoinsaturadas y poliinsaturadas, sin sumar colesterol.
En cuanto a los minerales, el cacahuete es una gran fuente de potasio, mucho más que el plátano, con hasta 680 mg por cada 100 g, así como de fósforo y magnesio, aportando también buenas dosis de selenio y zinc, además de una cantidad más moderada de calcio. Sí destaca en cuanto a las vitaminas del grupo B, especialmente ácido fólico, y a su aporte de fibra, con muy pocos hidratos.
La alta cantidad de grasas de este alimento contribuye a que sea muy calórico, entre unas 570 y 600 kcal, aproximadamente, según la variedad. Son así un producto muy nutritivo, saciante y gran fuente de energía, pero que, aunque concentra muchos nutrientes, se consume normalmente en cantidades pequeñas, por lo que su consumo debe considerarse un complemento a la dieta junto con otros alimentos no tan calóricos.
Cómo comprarlo, conservarlo y usarlo en la cocina
La forma más económica y saludable de comprar cacahuetes es con cáscara, tostados sin sal o al natural. Es preferible tostar el fruto seco cuando se vaya a consumir y guardarlo siempre en recipientes herméticos, en un lugar fresco y lejos de la luz y fuentes de calor, y no guardar el fruto pelado demasiados días, o puede ponerse rancio.
Otros formatos de venta de este fruto seco son la harina de cacahuete o cacahuete molido, que podemos emplear como cualquier otro fruto molido, sustituyendo a harinas de cereales en cualquier preparación o como alternativa a las proteínas en polvo. Capítulo aparte es la mantequilla o crema de cacahuete, con mil usos, siendo siempre recomendable optar por la 100 % natural.
Recetas con cacahuetes
Tarta rústica de plátano y cacahuete
Ingredientes
- harina de repostería (para la masa) 250 g
- mantequilla (para la masa) 125 g
- Azúcar (para la masa) 80 g
- Agua helada (3 cucharadas para la masa)
- Sal (una pizca para la masa)
- yema de huevo (para la masa) 1
- Mantequilla (para el relleno) 20 g
- azúcar moreno (para el relleno) 60 g
- zumo de limón cucharadas (para el relleno) 2
- Cacahuetes tostados a la miel (para el relleno) 50 g
- Plátano (para el relleno) 6
- yema de huevo (para pintar la tarta) 1
Cómo hacer tarta rústica de plátano y cacahuete
- Tiempo total 1 h
- Elaboración 30 m
- Cocción 30 m
- Reposo 2 h
Esta tarta rústica de plátano y cacahuetes se prepara sin mucho esfuerzo y con un resultado delicioso. El plátano combina muy bien con el cacahuete, que en este caso va caramelizado y le da un toque crujiente al pastel muy apetecible, y es que ya se sabe que hay ingredientes que maridan a la perfección y nos hacen disfrutar de postres gloriosos. Este es el caso, así que no te pierdas esta receta.
Ensalada slaai de aguacate y cacahuetes
La cocina de gran parte de África aún nos es totalmente desconocida, pero esta ensalada slaai merece un hueco en nuestros recetarios por sus ingredientes sencillos y delicioso sabor. Es un plato muy simple cuya base es el aguacate, bien aliñado con zumo de limón y jengibre, y rematado con cacahuetes más o menos picados. Existen diversas variantes y muchas opciones para personalizarla, como por ejemplo añadir una base de lechuga o acompañarla con hierbas frescas. Los rabanitos suelen ser un aderezo habitual, que además aporta otro toque crujiente y fresco con el que realzar la ensalada.
Langostinos con salsa de curry y mantequilla de cacahuete
Estos deliciosos langostinos con crema de cacahuetes al curry son una receta de inspiración oriental que creo que es excelente para resolver una cena improvisada. Sin necesidad de complicarse con ingredientes difíciles de encontrar, este plato sosprende con su sabor intenso y fresco, saliéndonos de los platos más habituales de cada día.
Cacerola baja con tapa Bistró Bra
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Foto de portada | Corleto Peanut butter
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