María Yuste
Editor SeniorUna de las peores inversiones que he hecho a lo largo de mi vida es comprar un robot de cocina. Por suerte, opté por un modelo mucho más económico que los mil y pico euros que cuesta una Thermomix. Sin embargo, parece que entre aquellos que sí lo hicieron, también hay muchos arrepentidos que, como yo, ahora le buscan nuevo dueño en Wallapop y otras plataformas de compra-venta de segunda mano. Incluso las personas que adoran su Thermomix venden la suya, pero, ¿por qué?
Normalmente, uno suele escuchar a los dueños de una Thermomix, y otros robots de cocina, hablar maravillas de cómo ya no les sale ni un plato malo y de que hacen viguerías sin esfuerzo ni casi tiempo. No dudo de su honestidad pero he llegado a la conclusión de que es gente a la que ya se le daba bien cocinar antes, incluso lo disfrutaba y no necesitaban de la ayuda de ningún cacharro especial. Estos son algunos de los principales motivos por los que, para muchos, esos sueños y esperanzas de triunfar por fin en la cocina se convierten en desilusión una vez hemos probamos el robot de turno.
Se queda obsoleta pronto
Con una inversión económica tan grande, uno espera tener un robot de cocina para toda la vida (o casi). Sin embargo, como suele pasar con la tecnología, el aparato luce viejo y desfasado antes de lo esperado. Especialmente, cada vez que sale al mercado otro modelo con nuevas funciones. De este modo, los más fans de Thermomix se apresuran a vender su robot antes de que se devalue más y quede completamente obsoleto.
El objetivo es ayudarse a financiar la compra del próximo lanzamiento. Como referencia, hace ya seis años que se lanzó en España la última Thermomix (la TM6) y el pasado 15 de febrero se presentó la próxima TM7, de ultimísima generación. Es decir que, a quienes hagan el cambio, le habría salido usar este robot de cocina por unos 250 euros al año.
Usarlo no es tan fácil como te venden
Cuando a uno le hablan de un robot de cocina, tiene la sensación de que todo va a ser echar los ingredientes dentro del vaso, apretar un botón y ya saldrá lista la comida para servir. Sin embargo, con pocas recetas esto es así. Normalmente, hay que estar implicado de forma activa en todos los pasos del proceso, ya sea quitando este ingrediente, añadiendo este otro, ahora usando tal accesorio... De este modo, cocinar con un robot termina no siendo algo tan diferente a hacerlo de forma tradicional. Sobre todo, si te ayudas de una picadora o de un procesador de alimentos, que es una inversión mucho más económica.
La suscripción de pago a Cookidoo
Uno de los motivos por lo que la gente revende este dispositivo, que se supone que te hace la vida más fácil, es porque la plataforma de Thermomix que te da acceso a las recetas tiene un coste anual de 60 euros. Sin embargo, después de haberte gastado ya 1.500 euros en el robot (en algunos casos, llegándolo a pagar en cuotas durante dos años), uno esperaría que las recetas fueran, por lo menos, gratis.
Vorwerk
La carne y el pescado no saben igual
Alguien tenía que decirlo y puedo dar fe de que la carne y el pescado no quedan igual de buenos que cuando los haces por medios tradicionales. Y es que estos alimentos cocinados en robot pueden volverse fibrosos o quedar demasiado hechos. Además de que el sabor nunca es tan perfecto como se consigue en el horno o en la sartén.
Los accesorios se deterioran
Además de la inversión inicial de unos 1500 euros en el dispositivo y la suscripción anual de 60 euros a la plataforma de recetas, uno realmente no deja de pagar nunca con una Thermomix. Los accesorios se desgastan y hay que cambiarlos de vez en cuando. Todo depende de la frecuencia de uso que le des, pero se deterioran más rápido de lo que parece y la factura de la inversión aumenta.
Es un mamotreto
El peso y el tamaño de los robots de cocina tampoco juega a su favor. De por sí, a nadie le gusta tener un mamotreto en su encimera. No obstante, si además tienes una cocina pequeña, te quita demasiado espacio y cocinar se vuelve más incómodo aún. Además, como es un electrodoméstico pesado, no puedes estar moviéndolo de aquí para allá para hacer espacio.
Hace un ruido infernal
Poco más que añadir. Más que en una cocina, uno podría pensar que está en la pista de aterrizaje de un aeropuerto cuando el robot de cocina está encendido.
La limpieza es engorrosa
Un robot de cocina, además de un mamotreto ocupando espacio en la encimera de tu cocina, es un mamotreto en la encimera de tu cocina cogiendo polvo. De este modo, no solo hay que limpiar el vaso y todos los accesorios cada vez que se usan sino que hay que ocuparse de quitarle el polvo al aparato en sí regularmente.
Foto de portada | Michael Kramer
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quhasar
Concuerdo en muchos de los aspectos que se citan en el artículo pero, lo principal, es que la Thermomix es muy, muy cara y ahora, para sacarle todo el jugo, hasta necesitas una "suscripción".
A mí me estuvieron comiendo la cabeza para comprar una y me lo planteé pero topamos con todo lo anterior... Así que cuando salió una oferta del último modelo de Lidl, la Monsieur Cuisine Smart, me decidí a comprarla. Y finalmente pagué por ella 200€ ya que me costó 400€ pero me devolvieron cinco cheques de compra de Lidl de 40€ sin limitación alguna durante los siguientes cinco meses. Por ese precio merecía la pena probar un robot de cocina. En este caso, tiene una pantalla táctil bastante grande, recetas guiadas y todas las bondades de una Thermomix pero en un formato bastante más grande. Y he visto ofertas aún mejores, además de que hay un modelo más económico y sencillo.
Al final cierto es que no la uso todas las semanas y que no tiene un catálogo de recetas tan amplio como el de la Thermomix pero es un aparato del que no me desharía ya que tengo localizadas algunas recetas que se han vuelto muy populares en mi casa. Luego puedes encontrar recetas en YouTube y experimentar un poco. Te da versatilidad y otras posibilidades bastante cómodas para hacer cosas sencillas que en un caldero o sartén son un engorro o ensucias más. En este caso, no creo que sea un aparato que haga excesivo ruido pero sí que ocupa espacio. Destacaría que tiene una potencia tremenda en sus cuchillas.
En resumen, por 200€ estoy muy contento aunque la utilizo menos de lo que debería, pero por más de 1.000€ estaría convencido de haber tirado el dinero y haber pecado de "marquitis".
Mi consejo, si tienes dudas en comprar la Thermomix, es que empieces por una de las alternativas económicas del mercado, que hay bastantes. Y a mí esta Monsieur Cuisine Smart de Lidl me ha convencido muchísimo. Luego, si se te queda pequeña o corta, que no creo, o se te rompe con los años y se ha convertido en un imprescindible de tu cocina en el día a día, entonces ya te puedes lanzar a por una Thermomix.
juangutierrezvaldemoro
Buenos días:
Pocas cosas hay peores que hablar de un tema del que estamos desinformados.
Soy cliente de Vorkerk (Thermomix y Kobold) desde hace casi 10 años.
En este comentario sólo me voy a referir al TM6 y TM31.
Mi experiencia, en ambos casos, ha sido inmejorable.
Con la TM31 elaboraba suculentos plátanos ( arroces, potajes, cocidos...). Como trabajaba en una isla diferente a mi lugar de residencia habitual, trasladaba cómodamente mi TM31 con la bolsa THERMOMIX para el transporte.
Cuando conocí el TM6 la experiencia mejoró aún más. Con sus múltiples modos de cocción podía elaborar por ejemplo pescados al vapor con el varoma (viene incluido cuando lo compras), mientras, al mismo tiempo, en la parte inferior cocinaba una crema de verduras con el consiguiente ahorro de energía eléctrica (un sólo aparato funcionando en lugar de dos fuegos de la cocina). También tiene modos de cocción al vacío y a altas temperaturas.
En cuanto a la necesidad de estar pendiente del TM6, mientras cocino, no estoy de acuerdo con esa afirmación. Si haces por ejemplo una fritura., el tiempo de cocción es extremadamente rápido, no tienes que estar pendiente de si se quema o no la cebolla, etc.bTM6, se encarga de todo. Si acaba un proceso, te avisa pero no tienes prisa, la cocción se detiene, se mantiene en stand-by, removiendo el contenido para que no se pegue en el fondo.
¿Dificultad de uso?...ninguna. si sabemos leer, sabemos coci ar y hablo por mí experiencia como cocinero novato. Sólo seguir los pasos.
La suscripción a COOKIDOO no es obligatoria y la máquina trae grabadas en su memoria una gran cantidad de recetas.
Yo le saco muchísimos partido... hasta muelo el café en grano. Y he podido desechar múltiples pequeños electrodomésticos que ya no necesito, ganando además espacio en la cocina.
El desgaste de las piezas no es habitual, solo tuve que cambiar la goma de la tapa en una ocasión. Pero, en cualquier caso, tienen un eficiente servicio post venta que te recoge la máquina en tu casa, te hace un presupuesto y la arregles o no te la devuelven a casa.
¿Cara? continuamente están haciendo promociones e incluso te la puedes ganar sin pagar ni un euro, solo con tu colaboración.
No suelo hablar en términos de caro/barato pues lo importante es ver la relación de calidad-precio. Si compro un robot de cocina y cuando se avería no sé qué hacer con él, nadie me atiende, y tengo que desecharlo por inservible ¿de verdad ha sido barato?
Ahora, bien. Si en lugar de sacar provecho a todas sus posiblidades, la uso para picar... pues sí, estoy de acuerdo, es una picadora o batidora de zumos muy cara.
Conclusión, no me arrepiento para nada en formar parte del amplísimo grupo de clientes de Thermomix y espero ya la llegada del TM7 que lleva nuestra experiencia gastronómica a otro nivel.
Espero haberles servido de ayuda.
Un saludo
ravedj
Yo compré la TM31 en el año 2004 con un precio de 900€ y sigo usándola. He tenido que cambiar el cubilete de arriba y la junta de la tapa en este tiempo, 5 y 12 euros respectivamente. Para alguien que no sabe cocinar como yo que te digan grados, minutos y gramos es una bendición, por que no me vale eso de "hasta que lo veas hecho" o "un puñado", eso a las personas que no saben cocinar no nos vale. No se crean que hago muchas florituras, simplemente cosas de comer; cuando la compré si que hice algunos postres, pan y algunas cosas exóticas pero más que nada para hacerme con el funcionamiento. De ahí pasé al arroz de verduras, el marmitako, las lentejas , etc. Si, todo eso se puede hacer en olla, por supuesto, pero con esto obtengo resultados predecibles vez tras vez y mientras trabaja puedo hacer cosas en medio como las camas o poner una lavadora sin tener que estar removiendo para que no se pegue. Además ensucio menos por que la uso para picar primero, para sofreir después y para guisar el final todo en el mismo vaso. Todos los de mi alrededor que la compramos a la vez (4 amigas mas) la siguen teniendo y usando a día de hoy 21 años mas tarde, a ver qué electrodoméstico sigue funcionando después de ese tiempo, a mi de ese tiempo solo me queda la thermomix. Las versiones modernas y el tema de la subscripción no me aportan nada así que seguiré usando mi TM31 hasta que diga basta antes de cambiarme a una nueva, no voy a hacerlo por que haya salido un modelo nuevo, no es una Play, es un electrodoméstico.