La receta más fácil de calabacín: está lista en 10 minutos y sirve tanto para una cena rápida o una comida ligera

Es verano, es temporada de recetas con calabacín, una hortaliza de lo más versátil y que da mucho juego en la cocina. Lo mismo nos sirve para un buen calabacín rebozado o un plato griego como el kolokithokeftedes o buñuelos de calabacín y queso feta (para que puedas pronunciarlo). Sin embargo, la elaboración más sencilla es esta a la plancha. Es una receta que está lista en 10 minutos y que gana mucho si lo acompañamos de un ligero aliño y algunos añadidos, como el queso feta y la menta. Es perfecta como entrante a la hora de la comida, pero se puede servir también como plato único a la hora de la cena.

El primer paso es lavar y cortar el calabacín en discos de un centímetro. Calentamos una plancha tipo grill (lo que nos permitirá no usar aceite) y marcamos el calabacín unos dos minutos por cada lado. El objetivo es que quede crujiente, pero no crudo. Cuando esté, reservamos.

Mientras tanto, preparamos el aliño mezclando el aceite con un poco de ralladura de limón y dos cucharaditas de zumo. Añadimos un poco de orégano seco, sal, pimienta negra y batimos hasta homogeneizar.

Por último, emplatamos la ensalada colocando los discos de calabacín en una fuente con el queso feta desmigado por encima, una cantidad al gusto de hojas de menta frescas y espolvoreando con las semillas de sésamo. Y ya solo nos quedaría regar con el aliño y servir.

Foto de portada | Directo al paladar

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