Cada hombre tiene su técnica propia a la hora de afeitarse (algunos incluso algo surrealista) y a veces son opuestas. En busca del afeitado perfecto, algunos se lavan la cara antes de empezar el baile de la máquina de afeitar. Otros sólo después de la operación afeitado.
Si usas el limpiador facial antes, la piel del rostro se reblandece. Si usas agua fría, los poros se cierran: eso no interesa. Por el contrario, usando agua tibia o caliente, se abren los poros pero la pequeña inflamación de la piel hace que parte del pelo quede dentro del folículo piloso y el afeitado es menos apurado.
La ventaja de no lavarse la piel antes del afeitado es evitar esa hinchazón o inflamación (no dolorosa) producida por el calor del agua. La longitud del pelo en el exterior de la piel está al descubierto y se consigue un apurado mejor. Tensando bien la piel y pasando la cuchilla en sentido contrario al crecimiento del pelo, conseguirás llegar a casa por la noche con menos evidencia de barba. ¿Cuál es tu método?
Foto | Freddy The Boy En Mensencia | Operación Afeitado Perfecto: cuchillas versus maquinilla eléctrica, Hemos probado la afeitadora Panasonic Pro-Curve
