Septiembre... mes de vuelta al cole, de final del verano, de retomar las rutinas... y de rupturas. El verano no es un buen momento para el amor (los estudios así lo confirman) y, al volver a casa, llegan las rupturas. Cada uno debe encontrar su propio método para superar el final de una relación, pero leer... leer siempre es buena idea. Y recordar que el dolor se puede convertir en un momento de crecimiento personal. Estas son nuestras recomendaciones para lograrlo a través de la lectura:
El otro hijo, Nick Alexander
Romper una relación siempre duele, más cuando se trata de una relación larga. Y más aún si no se conoce otra cosa. Eso es lo que vemos en El otro hijo, donde Alice, su protagonista, decide tras muchas dudas dejar atrás un matrimonio que ha estado durante décadas lleno de abuso. Para lograrlo, recurre a sus dos hijos, a sus diferentes formas de ser, para encontrar el camino hacia una nueva vida.
La amaba, Anna Gavalda
En La amaba, nos encontramos con la Anna Gavalda más intimista en una novela que es en realidad una larga conversación entre Chloé, una mujer recientemente abandonada por su marido, y su exsuegro, a cuya casa llega en busca de un cambio de aires que necesita para superar esa ruptura inesperada.
otras maneras de usar la boca, de rupi kaur
La poesía, con su sutileza y su capacidad para expresar sentimientos en pocas palabras, puede ser el género ideal para reencontrarnos después de una ruptura. En otras maneras de usar la boca, rupi kaur nos habla de cómo superar los golpes de la vida, entre ellos el desamor, de una manera contundente que llega al lector haciéndole una llamada a la reflexión.
Si supieras, de Kristan Higgins
Si supieras, de Kristan Higgins, es una novela a medio camino entre la comedia y el drama. Drama porque la historia de sus dos hermanas protagonistas es dura, y habla del desamor que llega con el divorcio y la infidelidad. Y comedia porque ambas encuentran en el humor (y en el amor que sienten una por la otra) la manera de encauzar unas vidas que no se parecen en nada a lo que tenían planeado.
Nosotros, de David Nicholls
Y si tomarse la vida con humor es una buena receta para superar un desamor, Nosotros, de David Nicholls, es la mejor prueba de ello. En la novela veremos la decadencia de un matrimonio a punto de separarse, las difíciles relaciones del protagonista con su hijo adolescente y un viaje que se convierte en un último canto de sirena en el que las debilidades de los protagonistas se convierten en carcajada para el lector.
El despertar, de Kate Chopin
El despertar es considerada hoy la primera novela feminista de la historia, a pesar de que el feminismo ni siquiera existía como tal cuando fue publicada, en 1899. La trama nos presenta a Edna Pontellier y su lucha por sobrevivir a su alejamiento de la ortodoxia imperante sobre cuestiones como la feminidad, la fidelidad o la maternidad, en un entorno tan conservador para la mujer como el Sur de Estados Unidos a finales del siglo XIX y ante la decadencia de su matrimonio y su deseo de encontrar el amor en otros brazos. Su publicación causó una auténtica revolución en su tiempo.
Come, reza, ama, de Elizabeth Gilbert
Muchas personas, cuando viven un desengañoso amoroso traumático, sienten la necesidad de huir. De buscar su nueva vida en un entorno diferente al habitual. Y eso es precisamente lo que hace Elizabeth Gilbert en Come, reza, ama, su autobiografía. Una novela que es en realidad un viaje de autodescubrimiento tras un divorcio traumático que lleva a su protagonista / autora de Italia a Indonesia, pasando por la India.
Uno más uno, de Jojo Moyes
Uno de los sentimientos más habituales tras una ruptura es la sensación de encontrarse perdido, como si toda nuestra vida se hubiera convertido en un caos sin remedio. Por eso, la lectura de Uno más uno, de Jojo Moyes, nos reconforta acercándonos a la vida de una mujer cuya vida sí es un caos absoluto, pero que encuentra en el camino la ayuda más inesperada y nos sumerge en una historia de amor dulce, divertida y esperanzadora.
Las mujeres que aman demasiado, de Robin Norwood
El primer paso de la receta para no sufrir por amor es aprender a amar. A amar bien, no de forma tóxica... no «demasiado», como explica Robin Norwood en Las mujeres que aman demasiado, un best-seller que ha envejecido bien, aun treinta y tres años después de su publicación. Si estar enamorada significa sufrir, es que algo falla. Y este libro puede ser la mejor guía para aprender a amarnos a nosotras mismas antes de embarcarnos en la aventura de querer a alguien más.
La chica del tren, de Paula Hawkins
Uno de los grandes éxitos de ventas de los últimos años, La chica del tren es una de las principales representantes del grip-lit, ese género que mezcla novela negra con thriller psicológico, con protagonismo femenino. Una lectura que atrapa como lo hace esta puede ser la mejor manera de distraer nuestra mente de un desamor, y más si aprendemos conociendo a su protagonista que no podemos quedarnos atrapados en una relación mientras los demás fluyen.
Sonrisas de Bombay, de Jaume Sanllorente
Dicen los expertos que un fracaso puede ser el mejor punto de partida para un momento de crecimiento personal. También un desamor puede cumplir esa función. Y para motivarnos, qué mejor que leer un libro que nos muestre las hazañas de grandes seres humanos, algo que nos demuestre, además, que hay cosas más importantes que el amor romántico. Sonrisas de Bombay es la historia de cómo su autor abandonó su vida en Barcelona para embarcarse en un extraordinario proyecto solidario.
Stardust, de Neil Gaiman
Una buena novela es siempre una gran idea. Y es innegable que Stardust es un libro de esos que se leen y no se olvidan. Divertida, original y con una visión del amor diferente. Acompañar al joven Tristan Thorn en su periplo para conquistar una estrella para su amada Victoria se convertirá en una experiencia de lectura maravillosa que nos incorporará, seguro, a la nómina de fans de Neil Gaiman.
Gente que viene y bah, de Laura Norton
A veces, cuando sufrimos un desengaño, nos parece que somos la única persona del mundo que está atravesando por algo así. Y consuela saber que hay cosas peores, como la que sufre la protagonista de Gente que viene y bah, que en una misma semana pierde a su prometido, que la engaña con una famosa presentadora de televisión, y su trabajo. Tomárselo con humor, sin duda, es la mejor solución. Y una lectura que nos haga reír... la receta infalible.
Imágenes | Amazon.
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