Con sus ochenta mil toneladas de peso, una altura de ciento cuarenta y cuatro metros, y una reserva de agua de noventa mil litros, la Tour Bretagne inaugurada en 1976 es un poco como la Tour Eiffel de Nantes (Francia), ya que su piso treinta y dos ofrece una vista panorámica espectacular de trescientos sesenta grados sobre toda la ciudad.
Conscientes de que su privilegiada situación y altura atraería a mucho turismo, el ayuntamiento encargó la decoración de la azotea al joven diseñador Jean Jullien quien, inspirado por la cultura popular de su infancia, ha sabido recrear en sus instalaciones un bar que representa el nido de una enorme grulla recostada de grandes ojos, que se abren y se cierran, y cuyo largo cuello atraviesa todo el espacio.
El cuerpo de la grulla ejerce las funciones de barra de bar. Repartidos por todo el espacio, se pueden ver enormes cascarones de huevos rotos, transformados en sillas y en mesas. Además de la divertida decoración, en el interior se pueden ver catorce pósters diseñados por Jullien de los lugares más emblemáticos de Nantes. Para acabar de redondear la experiencia, Nicolas Jullien (hermano de Jean) ha musicalizado “Le Nid” creando un original soundtrack.
Lo mejor de todo es que no se trata de una obra temporal, sino que se podrá subir a "Le Nid”, en lo alto del pico de la Tour Bretagne en Nantes – como quien va a un museo -, y visitar el espacio de jueves a domingo, de diez de la mañana a dos de la tarde. La entrada es libre, pero las consumiciones hay que abonarlas.
Más información | Le Nid Bar