Poco a poco van desvelándose alguno de los secretos mejor custodiados relacionados con la boda religiosa de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo en Gstaad. Beatrice Borromeo y Pierre Casiraghi vistieron trajes confeccionados por Giorgio Armani.
Durante la romántica ceremonia celebrada el primero de febrero en la iglesia de San Nicolás de Rougemont, en un pueblecito a pocos quilómetros de Gstaad, en los Alpes Suizos, Beatrice lució un traje de línea imperio en satén recubierto de tul en las tonalidades naturales del oro con el escote y las mangas decorados con cristales Swarovski, y un abrigo de cachemire de línea evasée con cinturón joya tono sobre tono, perteneciente a la colección Giorgio Armani Privée.
Pierre Casiraghi elegió un frac y un abrigo de terciopelo negro con solapas de piel de astrakán de la línea Giorgio Armani Made to Measure. Esta línea es la más exclusiva ya que permite crear y personalizar el propio traje sur mesure. Basta con pedir una cita, y luego dejarse guiar por el expertise de este diseñador italiano lleno de talento.
Las bodas en invierno son preciosas, el ambiente estupendo pero hay que vérselas con la nieve, y el frío, por lo que los clásicos trajes de ceremonia escotados y confeccionados con ligeros tejidos no son los más adecuados.
Beatrice Borromeo y Pierre Casiraghi serán, probablemente, los próximos hijos de Carolina de Mónaco en contraer matrimonio, ya que llevan saliendo un par de años, y parece irles de maravilla.
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