La semana pasada hemos tenido la suerte de ser invitadas a la apertura de un flamante flagship store en Madrid (Serrano, 25), la de la diseñadora de zapatos asturiana, Mónica Garcia. Un concepto diferente de la zapatería, que seguro que no va a dejar indiferente a nadie.
Su colección primavera verano 2014 es un dechado de creatividad en pieles exóticas como las de pez raya, serpiente de mar y que parece haber sido concebida para que los protagonistas absolutos sean los pies. Modelos con flores aplicadas, de magnéticos colores o con acabados de encaje, harán las delicias de las novias o de cualquie amante de los zapatos de calidad y muy originales.
El estudio de Mónica está en la misma tienda, aunque tiene su taller de zapatería en Avilés (Asturias). Según Mateo, su mano derecha: "somos una familia en la que cada zapato es una obra por si mismo. En Mónica García trabajamos siete personas, las hormas son alicantinas y los zapatos de niños los hacemos en Elda con diseños de Mónica".
Las pieles las traen de Italia, ya que pocos distribuidores tienen en su haber pieles tan difíciles de trabajar. Mónica García diseña divertido, original y cómodo. Me gustaría resaltar lo de cómodo, ya que entre las ventajas de sus diseños está una platilla con un grosor más que notable, que consigue que los zapatos no sean unos preciosos torturadores, sino que sea un placer llevarlos.
Como detalle original, la firma hace maletas a medida. A modo de antiguos baúles, de madera, con bandeja, pero con ruedas trolley, para que llevarlas tú mismo no sea un problema. Diseños retro, acabados artesanos y mucho glamour en la nueva tienda de Mónica García en la Milla de oro madrileña.
Mónica García, una firma en la que los protagonistas son los zapatos.
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