Después del Shanghai Museum of Contemporary Art y del National Art Museum of China, la exposición Culture Chanel se trasladará a la Guangzhou Opera House - diseñada por la arquitecta Zaha Hadid -, del 16 de enero al 3 de marzo del 2013.
Jean-Louis Fromont, comisario de la exposición, comentó en rueda de prensa que la primera exposición Culture Chanel esta basada en los grandes hitos de las secuencias biográficas de Gabrielle Chanel, que dieron lugar al nacimiento de todo un estilo.
Fueron precisamente los artistas quienes revelaron a Coco el sentido de la modernidad en una época donde la noción de la vanguardia campaba en un París donde pintores, músicos, poetas, y coreógrafos llegados de todas partes del mundo se fueron dando cita para intentar cambiar el mundo.
La biblioteca personal de Gabrielle Chanel reúne los libros de los artistas a los que conoció, admiró y quiso. Las dedicatorias que contienen son auténticas declaraciones biográficas: herramientas de sueños, de viajes poéticos y artísticos. Con todos estos libros tapizó las paredes de su famoso apartamento de la rue Cambon.
Poniendo su vida y su persona en marcha, imponiendo sus elecciones de vida a través de sus creaciones, Gabrielle Chanel cambió la historia de las mujeres. Libertad y movimiento del cuerpo gracias al deporte, pero también nuevos gestos adquiridos con la llegada de la mujer al trabajo; la libertad de poder llevar pantalones, de descubrir el rostro al sol y al viento, de poder elegir libremente a sus parejas; y de poder marcar, con el pelo corto y un cigarrillo en la boca, un nuevo camino para ellas. Esta energía hace: respirar, moverse, amar, soñar, y reinventarse como mujeres.
Esta exposición encuentra su ritmo, su cadencia, a través de una “conversación” entre artistas en la que participa Gabrielle Chanel. Nos estamos refiriendo al espectáculo “Train Blue” (tren azul) de la Compañía Ballets Rusos dirigida por Serge Diaghilev, para la cual Pablo Picasso pintó su telón de fondo donde se podían ver dos mujeres, ligeras de ropa, corriendo por una playa. Coco Chanel fue la encargada de diseñar el vestuario de los bailarines de la compañía.
Esta pintura monumental de Picasso es el leit motiv sobre el que se ha montado esta exposición: el mar, la carrera de estas dos mujeres desnudas, con los brazos al viento saboreando el placer de la libertad. Su amor por los espacios abiertos, por el deporte, su cuerpo delgado y ese empeño en imponer su allure a otras mujeres como un paso obligado hacia la modernidad: el mundo de las mujeres reinventado.
El Train Bleu era el nombre de un tren de lujo que, a principios de 1920, unía el norte de Francia con la côte d’Azur. Sus pudientes viajeros iban en busca de un estilo de vida más sano, y cercano a la naturaleza, donde las actividades deportivas ocupaban un lugar importante. Después de la Primera Guerra Mundial, entre las clases altas se produjo un gran deseo por los baños de sol al borde del mar, enfundados en escuetos bañadores.
Algunos artistas como Picasso se aferraron a estas nuevas costumbres para construir una visión decididamente más moderna de la figura femenina. Chanel dijo:
La moda no concierne sólo a la ropa; la moda está en el aire, es el viento quien la trae, la presentimos, la respiramos, está en todas partes, afecta a las ideas, a las costumbres y a los acontecimientos”.
Fue en esta época cuando Gabrielle Chanel empezó a tomar el sol en traje de baño. Hasta entonces, las mujeres ociosas de la buena sociedad debían exhibir una tez de porcelana, ya que el bronceado era la marca de las mujeres trabajadoras. También fue fotografiada en la Costa Azul vistiendo una marinière con las manos en los bolsillos de un pantalón, en una actitud decididamente alejada de los tradicionales códigos de la feminidad.
Gabrielle Chanel llegó a comentar que:
Una infancia sin amor ha desarrollado en mi un violento deseo de ser amada. Esta necesidad no tiene fin, resulta inagotable y, probablemente, explique toda mi vida, tanto mi fuerza como mis debilidades”.
En opinión de Chanel la moda tiene dos objetivos: la comodidad y el amor. En su opinión una mujer que no es amada es una mujer perdida. Sus grandes amores vienen de todas partes, muchos de fuera (de Rusia, de Inglaterra, a donde viaja). Es en el movimiento de estos encuentros, en su estilo de vida y cultura donde encuentra la inspiración (el tweed inglés, los bordados rusos), que declina en forma de numerosos modelos, tantos como maneras tiene de seducir.
Los modelos presentados en esta exposición van desde 1960 a nuestros días, es la mejor forma de demostrar que Chanel está por encima de las modas. A Gabrielle le gustaba decir que:
Chanel es sobre todo un estilo. La moda pasa de moda. ¡El estilo jamás!”
Más información | Chanel En Embelezzia | Chanel
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario