Puede ser un clutch, o un estuche de gafas de sol. Entonces te fijas en el nombre de la marca impreso a la derecha: Ladurée. Es la promesa de un dulce de alta calidad elaborado por una de las pastelerías francesas más internacionales. Sólo seis delicados macarons en el cofre de edición limitada Léopard.
Es la inspiración de los maestros pasteleros para celebrar la rentrée, está disponible desde el pasado 29 de agosto. El estampado felino rompe mis esquemas de la firma, habitualmente en tonos y diseños más suaves. No será mi edición preferida en cuanto a envase, no aporta nada nuevo, un déjà-vu.
Aunque lo importante es su interior. Me declaro golosa y no puedo (ni quiero) hacer nada al respecto, solamente permitirme caprichos como éstos siempre que tenga ocasión.
Los macarons (¿sólo seis?) en tono tostado saben a especias, los de color claro a bayas rosas. Un delicioso contraste de sabores. Ideal para la hora del té para dos.
En Embelezzia | Lanvin diseña la caja de los famosos Macaroons Ladurée