Hace dos años, cuando no vivía en Madrid, pasé una noche alojada en este Hotel Eurostars ubicado en el complejo Cuatro Torres Business Area del Paseo de la Castellana.
Cuando estudiaba mi carrera de Arquitectura de Interiores pasaba todos los días por delante desde que empezó su construcción, me preguntaba constantemente qué harían en la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid. Más tarde, cuando trabajaba en Londres en el estudio de Normal Foster, tuve la oportunidad de ir a una visita de obra de la torre Caja Madrid que está justo al lado de este hotel. Éste fue el día en el que supe que habría allí un hotel.
Esta torre denomidana como Sacyr Vallehermoso, posee 52 plantas y tiene una altura 236 metros. Está diseñado por Carlos Rubio Carvajal y Enrique Álvarez-Sala Walter y es la única de las cuatro torres que ha sido realizada por arquitectos españoles. Su Hotel Eurostars Madrid Tower, de cinco estrellas, ocupa hasta la planta 31 y dispone de un comedor de dos alturas, un SPA y ofrece una vista panorámica de toda la ciudad.
Julia Vidal para Embelezzia ©
Su planta tiene forma de triángulo equilátero con lados curvos que puede apreciarse de forma simplificada en el logotipo del hotel, presente en todas partes, como por ejemplo, en su toallas.
Julia Vidal para Embelezzia ©
No recuerdo en qué planta estaba ubicada mi habitación pero creo que en una de las zonas más altas, a juzgar por las vistas. Se trataba de una habitación Superior. El diseño estaba concebido para disfrutar de las vistas de la ciudad a través de su gran ventanal. Tanto la habitación como el resto de estancias utilizaba una paleta de colores de tonalidades negras, marrones y ocres así como materiales nobles como la piedra y madera de nogal. Le otorgaban un toque moderno y supongo que pretendían relacionarse con el tono negro de la fachada para conseguir una cierta uniformidad.
Mi opinión
Fue muy inteligente integrar el cuarto de baño en la habitación, la separación entre ambos está realizado por un vidrio con unos elementos verticales de madera que intentan proporcionar un poco de privacidad a la persona que esté disfrutando de un baño relajante, pero sin separar del todo ambas estancias.
La paleta de colores y combinación de materiales se me hizo bastante oscura. Estando en el baño durante el día y encendiendo la luz, en un panel un bastente complicado lleno de botones, no me veía bien en el espejo para maquillarme, con lo cual, me parece un error bastente importante. Además, me preocupa que la combinación de materiales tenga un envejecimiento poco “noble” y el interiorismo se quede obsoleto antes de tiempo.
Julia Vidal para Embelezzia ©
Por cierto, la cabina de WC y ducha se encuentran separadas pero al plato ducha no se le planteó la inclinación necesaria para el agua porque se me salió todo por fuera al ducharme aún estando la puerta cerrada…con lo cual, algo estaba mal planteado en su diseño.
Aún así, merece mucho la pena dormir en las alturas, despertarse por la mañana presionando un botón para que se levante la presiana automáticamente y observar todo Madrid a tus pies.
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