No existe lugar poco ortodoxo donde organizar una cena formal, con imaginación y buen gusto es posible. Claro que si lo organiza Rolls-Royce, la decoración con modelos emblemáticos de coches de lujo ayuda muchísimo. Incluso si el lugar elegido es la planta de montaje de su fábrica en Goodwood, Inglaterra.
Para ser uno de los 100 invitados a la velada "Dine On The Line" había que ser un cliente VIP. Todo un detalle por parte de la empresa, añadiendo el lujo que te recoja en casa un chófer al volante de un Rolls-Royce Phantom. ¿Demasiado lejos del evento? Sin problema, acudieron en helicóptero.
Una vez despejado el suelo de la planta de montaje artesanal, ¿qué hacer, qué poner, cómo instalar? Aplaudo el trabajo de los responsables de la decoración. La alfombra roja, las modernas arañas, los automóbiles de la mítica firma. El contraste de lo industrial con las dos largas mesas vestidas tradicionalmente, el alcance terrenal transmitido en la pizarra con texto handwritten. El respaldo de las sillas Louis Ghost de Philippe Starck en rojo, a juego con la alfombra.
Ahora lo vemos y lo admiramos (o detestamos, según los gustos) pero enfrentarse a un espacio vacío como la planta de una fábrica y convertirlo en un salón elegante y lujoso como éste tiene su mérito. Sin decoraciones supérfluas, las mesas con manteles y servilletas blancas, pocos centros en ella. Como sobremesa, la presentación exclusiva del nuevo Phanton Series II (foto superior).
Vía | Le Blog - Pasión Lujo En Embelezzia | Rolls Royce ha presentado en el Salón de Ginebra el Phantom Series II
