En unos pocos meses, Tonya Hawkes ha conseguido posicionar sus clutches entre las fashion insiders y las webs de venta online más importantes a nivel internacional. Los materiales utilizados para su fabricación y la forma de éstos, han conseguido que algunas como Leandra Medine o webs como Moda Operandi, apuesten por ellos.
Tonya Leigh Hawkes creció en Issaquah, Washington, a pocos minutos de la ciudad de Seattle. Inspirada por la belleza y el sonido envolvente de sus humedales naturales y montañas, los paseos a caballo se convirtieron en su actividad favorita. La diseñadora se sumergió inmediatamente en el mundo de la artesanía atraída por los intrincados detalles, las brocas, las cuerdas de plomo y las sillas de montar y así fue como ella cultivó su buen ojo para los artículos de cuero de alta calidad. Su otra gran inspiración ha sido su madre, una modelo que le introdujo en el mundo de la moda.
Tonya estudió moda en el Seattle Central antes de continuar en el Bellevue College y luego se mudó a la gran manzana para estudiar ilustración en el FIT. Su educación la licenciada en diseño técnico proporcionó. Ya en Nueva York, la diseñadora se unió a Donna Karan y fue nombrada diseñadora jefe de bolsos de DKNY y de pequeños artículos de cuero en el año 1994 y cuatro años después se convirtió en la Directora de Diseño de la firma. Debido a su gran éxito en Donna Karan, a Hawkes se le ofreció el puesto de directora creativa de Furla y durante dos años fijó su residencia en Italia, hasta que Donna Karan se dio cuenta del papel que jugaba en la compañía y le pidieron que volviese dándole el puesto de Directora Creativa y Vicepresidenta del departamento de bolsos, zapatos, artículos de marroquinería y accesorios de DKNY. A pesar de esta oportunidad, Hawkes echaba de menos su vida en Italia y en 2005 decidió volver a este país y comenzar su propia empresa de diseño. Así fue como nació su firma homónima Tonya Hawkes.
Y aunque ya hace varios años que la americana se tiró a la piscina con su firma, no ha sido hasta esta última temporada cuando sus bolsos han ganado cierto protagonismo. En sus diseños, Tonya combina el estilo sixties con una influencia más global al mezclar la geometría con exóticas pieles que recubren sus clutches. Son casi obras de arte portables.
Eso sí, los clutches de Tonya Hawkes son para bolsillos pudientes, sus precios van desde los 1000 a los 1335 euros.
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