En francés, la palabra "clochard" significa vagabundo y, en el mundo de la moda, desde ahora podría pasar a significar también superposición de tendencias actuales porque eso es exactamente lo que ha hecho la diseñadora María Escoté en su nueva colección bautizada con dicho nombre.
La colección nace fruto de la cantidad de información que consumimos diariamente a través de las redes sociales y los medios de comunicación. Inspirada por esa cantidad ingente, la diseñadora ha hecho una propuesta en la que las prendas también se superponen en un “sin sentido” intencionado y que, dentro del orden del desorden, acaban dando origen a una estética propia.
De este modo, se mezclan denim con blondas bordadas y perlas, vestidos de crochet engarzados con pedrerías y vestidos de noche con estampados creados por la diseñadora en lentejuelas que se han bordado una a una de manera artesanal en la India.
Aunque en la mezcolanza de tendencias actuales no es el único lugar en el que la diseñadora española ha encontrado alianzas.
Escoté y Honor han unido fuerzas para que también lo hagan moda, tecnología y arte. El resultado es la primera colección de moda en la que todo el proceso ha sido documentado con un móvil, desde los bocetos iniciales hasta la elaboración de las prendas.
Se ha llevado a cabo con el HONORView20, el primer Smartphone con una cámara de 48 megapíxeles. Lo que ha permitido, además, que la campaña sea fotografiada con este móvil por el reconocido fotógrafo de moda Txema Yeste.
Este acontecimiento representa un gran paso adelante en fotografía móvil, con terminales como este, que ya son capaces de hacer fotografías de editorial de moda (dichas fotos de pueden apreciar en las fotos del evento de presentación que acompañan este artículo).
Tampoco se trata de la única colaboración. Swarowski está presente en dos de creaciones de Escoté que reúnen más de 120.000 cristales colocados uno a uno y manualmente a lo largo de más de 100 horas de trabajo.
Por otro lado, el calzado de la colección también ha sido diseñado por María Escoté para la firma, también española, Cuplé. En él destacan las cadenas en color dorado y piezas con pedrería que, jugando con bases transparentes de vinilo y tulle, consiguen un efecto pie desnudo.
En esta colección se puede apreciar la evolución de María Escoté hacia unos diseños más glamourosos de alfombra roja, que dejan en el pasado colecciones más infantiles como las de Mi Pequeño Poni.
Los estilismos juegan con las tendencias más complicadas de la temporada, como las capuchas de lentejuelas que le hemos visto lucir a Katy Perry, hombreras XL que bien podríamos ver en un videoclip de Rosalía o ese total look de vaca tan Western que nos encantaría ver lucir a Dua Lipa.
Diseños muy cañeros, rompedores y diferentes. Mezclan moda y arte, porque aunque no sean para llevar a la oficina, son todo un festín para la vista y podríamos estar mirándolos horas
Ayer, en la Galería WeCollect, tuvimos la oportunidad de ver los diseños por primera vez en una presentación que sorprendió por la originalidad de la propuesta y en la que no hubo un desfile al uso pero en la que la tecnología compartió protagonismo con la moda.
Fotos | María Escoté.
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