Esta vez los italianos Dolce&Gabbana me han sorprendido para bien. Inspirándose en la gran diva de la ópera Maria Callas, han creado una colección elegante y teatral, llena de telas nobles como la tela de tapicería, los brocados, y el terciopelo, que se llenan de incrustaciones y cristales para hacerlas aún más barrocas.
Las cortas faldas tulipa se combinan con rígidos corsés. Los pantalones se llevan al tobillo y se conjuntan con chaquetas de estilo militar. Las blusas se llenan de broches imitando condecoraciones.
Me han encantado las faldas realizadas con chiffon blanco. Y las camisetas con la imagen de Maria Callas seguro que se convierten en un superventas como las de Steve McQueen y David Bowie de temporadas anteriores.
Para abrigarse, nada más elegante que capas realizadas con piel de chinchilla, con terciopelo o con estampado de leopardo. La gran Maria Callas seguro que habría sido feliz con cualquiera de ellas.
Para cerrar el desfile, han desfilado numerosos vestidos realizados con corsés con los carteles de algunas de las óperas más conocidas, y con faldas largas de gasa, con estampados pictóricos.
Entre tanta diseños austeros por la crisis, se agradece un colección original y que por lo menos sea reconocible cuando la veamos entre tanto diseño repetido en las editoriales de las revistas.