Guapa a rabiar. Fresca, natural y prescindiendo de esos minivestidos a los que es adicta sobre las alfombra rojas (al menos en portada), que no a enseñar pierna, Blake Lively aprovecha su espectacular físico para darle una bofetada a la primavera y sus cambios de humor para plantarse en la menos indecisa de las estaciones. Un verano de playa, sol, arena, surf y cuerpazos. De piel morena y pelo efecto mojado. De bañadores, curvas y mucha fiesta.
De la mano de Mario Testino, la protagonista de Gossip Girl vuelve a la carga en la portada y páginas interiores del número de junio 2010 de la edición americana de Vogue, pero esta vez dejando atrás la sofisticación propia de Manhattan en favor del sport chic de los Hamptons.
¿Puede estar más sensual?
El sex appeal de esta jovencita es incontestable de la misma manera que su tirón mediático es un hecho. Su físico de infarto, que encarna a la perfección el prototipo americano, y su papel de descarada noble en la ficción, han hecho de ella todo un icono en muy poco tiempo. Lo raro es que las marcas no se la quiten todavía de las manos…
Si es que está guapa hasta con mono de neopreno…
Y qué decir de su palmito en biquini.
Anda, curiosamente en esta instantánea lleva el mismo vestido de Hervé Léger con el que acudía no hace mucho Leighton Meester a un estreno (en la foto no se aprecia, pero el de Blair también es abierto de hombros).
¿Improvisamos un duelo de estilos y decidimos a quién le queda mejor?
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