¿Cómo se pasa de ser una chica mala a ser uan de las estrellas más glamourosas de Hollywood? Pues muy fácil, con un buen asesor de estilo y dejando de lado tus deseos góticos o rebeldes. Ese es el caso de Angelina Jolie, quien es hoy por hoy una de las estrellas más sexy’s y bien vestidas del planeta. Si a eso le agregas a Brad Pitt como pareja y una labor de embajadora de UNICEF pues entonces si que el estilo de Angelina tenía que cambiar.
La chica comezó a hacerse famosa en películas medio malas y casi olvidables, salvo por ella. Aparecía en las galas con atuendos extraños, ya fuera un largo vestido negro de Morticia Adam’s o enfundada en cuero. Su pareja de ese entonces Billy Bob Thorton tampoco ayudaba en el estilo, pues el también era muy alternativamente transgresor con su look entre cowboy y rockero.
Pero de pronto Angelina como toda princesa de cuentos se debe haber encontrado con un hada madrina y comenzó su escalada a la fama y al buen gusto. Digo algo debió heredar de su elegante madre Marcheline Bertrant y del estilaso de Jon Voight. Así que vemos una transformación de rana a princesa en un abrir y cerrar de ojos.
Obvio que hay costumbres que no se pueden dejar, como el uso del color negro que es uno de los que más atraen a la Jolie. Pero ya no de chica mala gótica, sino con elegantes little-black dresses que usa en ocasiones no tan formales y conjuntos de chaqueta y pantalón para algunso eventos en su papel de embajadora de UNICEF. Muy sobria y sofisticada.
También le sigue gustando el cuero, pero ya no en un sentido motero, sino elegante. Incluso se atrevió a llevar un vestido de este material que si no hubiera sido por el corte y la forma como lo llevó hubiera parecido más propio para una sala de striptease.
Pero tal vez su sencillez y sobriedad en los looks de diario, se ve opacada por sus apariciones en la alfombra roja, donde la Jolie si que destila todo el poder de sus labios carnosos y su mirada felina. Busca siempre diseños largos y favorecedores, con escotes de vértigo. Adora los de cuello halter.
Los busca entallados a la cintura, rectos o con falda de sirena para marcar su figura y ahí es donde aparte del negro vemos mucho blanco, arena e incluso rosa. Le gusta jugar con los colores y con las joyas. Además de que Angelina a aprendido a escoger perfectamente peinados y maquillaje. Ya sea recogido con formalidad o suelto sinuosamente su pelo siempre acompaña perfectamente a sus atuendos, mientras que puede maquillarse con intensos labios carmín o simplemente ponerles algo de gloss.
La chica sabe lo que le va y sus accesorios siguen la norma de más es menos. Le fascinan las sandalias descubiertas con un corte cuadrado. Aunque a veces experimenta con otros modelos como en color nude o blanco más peep-toe y vintage.
Hasta embarazada la chica sabía como sacarse el mejor partido y en su papel de madre ni se diga, sigue siendo estilosa y sobria sin ningún problema.