Ya os lo comentamos hace un par de días: este verano tendremos Olivia Palermo para un buen rato. Y es que la it girl más perseguida de estos últimos tiempos, vuelve a prestar su imagen, esta vez para la campaña Primavera-Verano 2011 de la firma de ropa Tibi. Ella se ha confesado fan de la marca desde hace ya unos años: muchos de sus estilismos estaban formados por prendas de ésta. Vestidos, cárdigans, cinturones… ¡Olivia lo tiene todo!
Y ahora la firma ha mostrado su amor hacía la socialité más conocida del Upper East Side y le ha pedido que sea la protagonista de su nueva campaña. Una campaña divertida, fresca y original donde aparece una Palermo de lo más natural y guapa. Y digo guapa pues viendo la campaña de Mango veo una chica con muchos años de más, cosa que no me gusta. Aquí la vemos sin su novio (¡oh, qué pena!) pero con ese no se qué que tanto la caracteriza.
Las imágenes son de estudio con un fondo que varia en cada una de ellas. Una de mis preferidas es esta, donde ella luce un minivestido blanco muy ladylike, una chaqueta en camel, sandalias y un clutch de pedrería en color turquesa que es divino de la muerte.
Esta colección está formada por vestidos en colores vivos y llamativos: este modelo en amarillo es santo de mi devoción. El cinturón con detalles de dos elefantes es genial para todo tipo de estilismos: jeans, chaquetas, vestidos, etc.
Pero también hay espacio para outfits en total look negros: este compuesto por t-shirt y pantalón no tiene nada, pero a la vez me encanta.
La gabardina sigue pegando fuerte, esta vez la firma la ha reinterpretado con un cuello de lo más original: en tamaño XXL y plisado. Los shorts en rojo y la camiseta en azul son prendas sencillas pero que casan con todo.
Como ya os anunciamos esta semana pasada, la falda que lució en el desfile de la marca estaba sacada de la colección Primavera-Verano 2011, y aquí os dejamos la prueba de ello.
Para terminar os dejo con una instantánea muy Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes: que no falten las gafas grandes y las pulseras en sus muñecas.
¿Qué os ha parecido?