Las flores salen siempre en primavera y continúan espléndidas en verano. Mis favoritas son las que tienen un tamaño mediano, ni floripondios gigantes ni minis como las provenzales. Taylor Swift las lleva de una manera y Lady Gaga de otra. ¿Adivinas cómo?
Taylor no puede ser más perfecta y a mi que le va a quitar el trono a Miranda Kerr (veremos cuandos sea madre). Si os fijáis en el primer plano es como de una muñeca de las de antes, de las que se coleccionaban con tez de porcelana y labios carmesí. Ella sigue la máxima de Maria Antonieta, cuanto más blanca mejor. Por eso su vestido de flores rojas le sienta a las mil maravillas.
Curiosamente a Lady Gaga también le encanta llevar siempre la tez blanca ¿nos imaginamos a ambas morenas a rabiar? Ella ha estado de paseo y cuando sale, es como sacar el baúl de pandora. En su caso las flores no iban en el vestido, sino en el ramo. En una especie de extraño vestido de novia con ramo incluido y toque de geisha con gafas de Lennon la hemos visto en Japón y por lo que se ve totalmente rodeada de admiradores.
No son comparables, claro está, pero cuando a una la regalan flores todas las mujeres nos sentimos igual ¿o no?
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