Iselin Steiro es el nombre de nuestra protagonista de hoy, un nombre que a simple vista no pueda decirte mucho pero realmente estamos hablando de una de las modelos más emblemáticas que hay en la pasarela actual.
Su rostro probablemente sea más reconocible, esa mandíbula marcada y sobre todo esa espectacular presencia hace que no pase inadvertida, tanto en pasarela como en campañas y editoriales, lugar donde sabe sacar partido a su potencial a las mil maravillas, gracias a sus dotes camaleónicas.
Nacida en Noruega, Iselin Steiro posee en la actualidad 23 años, pero aquí donde la veis ya lleva desde el 2003 desfilando en lo más alto. Una carrera de contrastes, de idas y venidas, pero a pesar de ello Iselin tiene ese don que solo las más grandes poseen y es que sus retornos a las pasarelas consiguen levantar más expectación y la hacen más importante si cabe.
Sus comienzos
Veamos un poco como fueron sus comienzos que datan del año 1999. Por aquel entonces Iselin Steiro acababa de cumplir los 14 años y ya le seducía la idea de posar delante de las cámaras hasta el punto de plantearse un futuro como modelo. Primero llegaría la propuesta de un cazatalentos en Londres algo a lo que sus padres se opusieron en un principio. Unos meses más tarde Iselin consigue convencerles para que le dejen realizar una prueba fotográfica en Oslo. No se arrepentirían, gracias a esa sesión nuestra protagonista acabaría firmando su primer contrato con la agencia noruega Team Models.
Su llegada a las pasarelas vendría 4 años después, ya que una de las condiciones que pusieron sus padres es que se dedicase a sus estudios y dejase la carrera como modelo en un segundo plano. Así fue como su debút tendría lugar en Nueva York para Calvin Klein, y posteriormente en Milán para Prada, y es que Miuccia Prada ha sido una de sus grandes valedoras.
Poco a poco su carrera iría despegando, sobre todo en París donde la temporada siguiente ya se haría con los desfiles importantes como los de Balenciaga, Chanel, Christian Dior y también en Milán donde la veríamos para Dolce & Gabbana (imagen superior). Fruto de ese gran despegue, las agencias comenzarían a rifarse sus contratación, y finalmente ficha por Women Model Management y se traslada a vivir a Nueva York.
Sus mejores trabajos
Sus mejores años sin duda fueron el 2005 y el 2006. Ya se empieza a hablar de Iselin como una de las modelos con un futuro más prometedor, y al mismo tiempo llegan sus primeras campañas publicitarias como las de Jill Stuart, Benetton, Hugo Boss, D&G y Roberto Cavalli, todas ellas en el 2005.
La carrera comienza a ser meteórica, y en el 2006 se convierte en una de las modelos más solicitadas, tanto en pasarela como en campañas, convirtiéndose en imagen de Gucci, Chanel y Versace (imágenes superiores) entre otros, y sustituyendo a la mismísima Natalia Vodianova en la apertura del desfile de Calvin Klein después de 7 temporadas consecutivas, sin duda los mejores momentos de Iselin Steiro como modelo, que completaría con diversos editoriales, aunque particularmente me quedo con el que hizo para Vogue Paris con Mario Sorrenti (ver galería).
Retirada y vuelta a las pasarelas
En el 2007 rompe su progresión como modelo y decide retirarse de las pasarelas para iniciar sus estudios de arquitectura en Oslo. No en vano, su mayor ilusión en cuanto abandone las pasarelas es convertirse en diseñadora de interiores.
Aunque la viéramos fuera de la pasarela, seguiría cumpliendo fuera de ella en diversas campañas y editoriales que ya tenía apalabradas, de hecho la veríamos en las campañas de Valentino (cambio de look incluido) y la de Zara para la Primavera-Verano del 2007.
A partir de ese momento se tomará ese respiro para enfocar sus estudios, y no sería hasta finales del 2008 cuando la volveríamos a ver desfilar, concretamente en París para Balenciaga, Chanel y Givenchy.
Lejos de perder protagonismo en la pasarela, seguiría siendo igual de solicitada que cuando las abandonó, año y medio antes, incluso ha protagonizado después de su vuelta las campañas de Lanvin donde la vemos espectacular de la mano de Steven Meisel y la campaña de Balenciaga de esta primavera-verano 2010. Además recientemente la hemos podido ver como portada del calendario Vogue Paris de este 2010. Sin duda una de las modelos más camaleónicas que podemos encontrar en la pasarela actual.
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