A lo largo de nuestra vida, nuestro pelo habla por nosotros. Lo usamos para contarle al mundo quiénes somos y qué queremos decir. Pero con mucha frecuencia, las mujeres y los hombres son juzgados si su pelo no se ajusta a las reglas y expectativas (muchas anticuadas) que la sociedad tiene con respecto a cómo debemos usarlo.
Pantene sabe que el pelo puede decir muchísimo sobre quiénes somos. Tenemos la misión de desafiar los prejuicios y promover un nuevo estándar de lo que se considera un pelo increíble... un pelo que se define solo por la persona que lo usa.
Y es que el pelo es parte de lo que proyectamos hacia el exterior. Nos permite mostrarnos, expresarnos e, incluso, desafiar prejuicios y hasta romper con lo establecido. Cómo se lleva el cabello también es una actitud. Prueba de ello son canciones como 'Suéltate el pelo', de Tini, que lo expresa perfectamente.
Pero hagamos un recuento, por ejemplo, pensemos en el pelo corto; para éste, el siglo XX ha sido decisivo. Por un lado, Hollywood ha sido factor para popularizar distintos looks: en los felices 20, las mujeres comienzan a teñir el pelo y a lucirlo extremadamente corto. El empoderamiento femenino se empieza a asomar y, bueno, ha llegado hasta nuestros días.
Ejemplos podemos encontrar muchos. Como el de ella, Delfina, quien se inspiró en esta manera de ver la vida, siguiendo sus reglas, y demostrando quién es a través de su pelo. “Cuando me corté el pelo por primera vez, la sociedad básicamente me decía que no iba a encontrar trabajo con este pelo. Me decían que mi corte de pelo era para hombres y no para mujeres. Pero para mí, mi pelo tiene que ver con la feminidad, porque creo que la feminidad tiene que ver con la fuerza. Mi pelo expresa justamente eso. Soy un a mujer fuerte y mi pelo le dice a la gente que tengo la libertad de ser quien soy”, relata.
El siglo XX también ha sido un aliado en cuestiones de diversificación del arreglo estético y las opciones que tenemos para el cuidado del pelo.
La época moderna no es el único periodo en que los hombres han lucido pelo largo (incluso recordemos que en algún momento eran los que portaban pelucas); la llegada del concepto ‘unisex’ durante la ola pop de los años sesenta, permitió suavizar la rigidez de los looks masculino y femenino, haciéndolo más inclusivos.
Como bien lo comenta Omar, “la sociedad me dice que mi pelo no es lo suficientemente viril, y la gente tiene problemas para aceptarlo, especialmente en situaciones de trabajo. La gente piensa que mi pelo es demasiado femenino, y que no puedo ser un ingeniero con un pelo así. Pero mi pelo dice: ‘Mírame’. Dice: ‘Estoy en lo que soy y estoy orgulloso de eso’”.
¿Y qué hay con las canas? Bueno, no siempre la gente ha querido cubrirlas, de hecho empolvar el pelo con talco era una práctica de elegancia en el siglo XVIII. Cosa que en algún momento también hizo Karl Lagerfeld en los 90.
Por lo que buscar un look muy personal que no cubra las canas y que demuestre fortaleza, es una cuestión de actitud, como ocurre a Paula: “Toda mi vida estaba cambiando, así que también quise cambiar mi pelo. Todo el mundo tenía algo para decir, pero me mantuve firme en mi decisión. Uno tiene que hacer lo que le parece correcto, no para su edad, sino para su vida. No importa lo que digan los demás. Mi pelo largo y gris en realidad me hizo avanzar, me dio coraje para mi carrera y para mi vida. Mi pelo dice: ¡El mundo ha cambiado! Puedo usar el pelo como lo desee. Este look le dice al mundo que puedo lograr lo que quiera. ¡Y así es!”, cuenta.
Como puedes ver, cada quien decide el look de su pelo y le darle un significado especial que vaya con su personalidad.
Al final, eso es lo que un Pelo Pantene busca proyectar: personalidades únicas, actitudes disruptivas, momentos de cambio, placer de vida… en fin, ¡todo lo que quieras expresar con tu cabello!
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