En Trendencias os hemos ido contando los diferentes looks de la Primera Dama Francesa en su primer viaje oficial. Pero todavía nos falta por analizar la última noche que pasó en Londres, donde acudió a la cena de Estado ofrecida en Ghildhall, en el distrito financiero de Londres.
La esposa del presidente francés Nicolás Sarkozy volvió a acaparar todas las miradas. Para esta ocasión, Carla Bruni eligió un vestido color burdeos palabra de honor con un fajín ajustado debajo del pecho del que colgaban una especie de volantes a cada uno de los lados combinado con un espectacular collar de oro blanco y brillantes. Iba muy elegante y sencilla, como en la cena anterior, aunque a mi el color no me convence. Esta vez prefirió dejarse el pelo suelto, para cambiar de peinado. El caso es que la francesa volvió a despertar los flashes de todas las cámaras y acaparó todas las miradas.
No sé que modelito me gusta más porque son bonitos, discretos y muy apropiados para este tipo de actos. Los dos son del mismo estilo y el único fallo que les veo es el color, unos tonos demasiado apagados, muy a juego con la ciudad londinense.