Dicen que una mujer nueva necesita deshacerse de los objetos del pasado y al parecer es lo que está haciendo Britney Spears desde que se separó de Kevin Federline: nuevas amigas, nuevo look, nuevo hombre. El siguiente paso será la subasta de su vestido de boda.
El vestido diseñado por Monique Lhuiller para la boda de la princesa del pop en septiembre de 2004 fue el número cuatro entre los "vestidos de boda más glamourosos". Esta hecho en seda italiana, palabra de honor y es de un estilo bastante clásico y romántico. Costó alrededor de los 26,000 dólares, pero el precio de salida en la subasta aún no se ha determinado.
Una fuente cercana a la cantante reveló que desea subastar el vestido, ya que no representa para ella una ilusión, prefiriendo que los beneficios vayan a parar a la fundación que la Spears ha creado. Así que si quieren un vestido con historia y que es bastante bonito ya lo saben, esperemos que la historia no se repita.
Vía | Hollyscoop