Hay tantos tipos de bodas como de novios, como de personas. Y tanta ambientación musical para una boda como gustos en este sentido. Y ya sabemos que, para gustos, colores. O, mejor dicho, canciones.
Clásica
Hay piezas clásicas que se han convertido en omnipresentes en la mayoría de celebraciones: el Ave María de Schubert, el Aleluya de Haendel, el Canon de Pachelbel... Es difícil aportar un punto original en el terreno de la música clásica, así que quizá sea mejor no intentarlo. Y, sobre todo, asegurarnos de que los músicos contratados conozcan la pieza elegida. Si no, podemos encontrarnos desastres como este:
Temas actuales
Cada vez es más frecuente seleccionar un tema de actualidad para que suene durante la ceremonia, más o menos versionado. Una opción que nos encanta es este Lovesong de Adele, con solo un violín y un chelo de fondo.
En el polo opuesto estaría el I Believe I Can Fly, de R. Kelly, perpetrado por dos invitadas a una boda como sorpresa a los contrayentes. Seguro que se quedaron boquiabiertos, sí. Ellos y cualquier persona a seis kilómetros a la redonda.
Una estrella en tu boda
Ed Sheeran se está conviertiendo en otro clásico de las bodas. Si Thinking Out Loud ya es una idea fantástica en cualquier caso, no os quiero ni contar que el propio Ed se presente en una boda para sorprender a los novios.
Esto de que tu cantante o banda favoritos aparezcan de la nada en el día de tu boda parece ser tendencia en Estados Unidos. Un valiente novio sorprendió a su mujer con la presencia de Maroon 5 en el gran día. Y digo valiente porque Adam... es mucho Adam.
Músicos sorpresa
Una opción arriesgada (pero que, a veces, funciona) es que los propios novios se lancen a cantar durante la ceremonia. La pionera de esta práctica en España acumula ya en YouTube... ¡más de 15 millones de visitas!
Pero, ¿cómo se os quedaría el cuerpo si el que se lanzara a interpretar, micrófono en mano, fuera el propio cura? Pues eso es lo que ocurrió en esta boda, en Estados Unidos, en que el oficiante se atrevió con el Hallelujah de Leonard Cohen...
Sacando nuestra alma friki
Nuestro yo friki quizá debería quedarse en casa en ese día tan especial. Pero si no podemos ocultarle al mundo que tenemos un lado oscuro, esta entrada al ritmo de Marcha Imperial tiene su punto:
Otra cosa ya sería creer que es buena idea reunir los conceptos «boda», «mariachis» y «Mario Bros» en un solo concepto. He aquí el (aterrador) resultado:
Me gusta el fútbol
Que a alguno de los novios les apasione el fútbol no tiene pinta de ser una buena noticia a la hora de elegir la música. Si no ponemos freno a las pasiones deportivas, la entrada del novio puede convertirse en un momento tan terrorífico como este:
Si os conocisteis en un estadio o realmente queréis dar ese bombazo, al menos queda la opción de disfrazarlo de coro clásico con la melodía de la Champions League. Por aquello de disimular un poco:
Por unos motivos o por otros, la música de una boda puede llegar a ser inolvidable. Lo será, seguro, para los novios, así que ellos serán quienes mejor puedan elegir la banda sonora de su gran día.
Fotos | Pixabay
En Trendencias | Los peligrosos especímenes que deberías evitar en tu boda
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario