Hay gente que adora la firma al frente de Nicolas Ghesquière, Balenciaga, y cree que su nueva campaña Primavera-Verano 2012 es lo más. Otra parte de la población opina que no todo vale y no por llevar ese nombre puede presentar imágenes como éstas. Sea como fuere, estas fotografías me viene que ‘ni pintao‘ al día de hoy: domingo. Éstos sirven para ordenar la casa, descansar y hacer nada. Aunque según la firma, los domingos son para lidiar de la mejor manera con la resaca.
Pues no puedo pensar en otra cosa al verlas: desorden por toda la casa, pelo alborotado, cara de pocos amigos… Eso sí, luciendo la marca como se puede.
Una campaña que a mí parecer (y a sabiendas que otros de mis compañeros no opinan igual que yo) carece de sentido.
Pero como hoy la gente hace lo que le da la gana, sin seguir unos protocolos y persiguiendo sus instintos, parece que Ghesquière ese día tenía un dolor tremendo de cabeza.
Seguro que el motivo de esta campaña tiene un motivo loable (o no, nunca se sabe) pero de ser así yo no lo encuentro por ningún lado. Obvio, ¡hay tanto desorden!
¿Creéis que con estas premisas las prendas de la firma pueden lucir igual de bien?
¿Qué os parece el resultado final?
Fotos | Balenciaga
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