Ayer veíamos a Katie Holmes metida de lleno en su faceta de esposa y madre, y hoy volvemos a recuperar su polémica incursión como modelo en el mundo de la moda de la mano de Miu Miu: aquí van el resto de imágenes que conforman la campaña de primavera-verano 2009 de la otra firma de Miuccia Prada.
Y de nuevo vemos a una Katie prácticamente desconocida, básicamente porque no se la ve, gracias de nuevo a esa luz amarilla y ténue que crea una atmósfera casi asfixiante, y esta vez, yace tumbada en la cama, en una posición incomodísima casi propia del contorsionismo, pero con un vestido que a mi, si no fuera tan caro, ya me habría vendido.
Así que si alguien pensaba que lo de Katie era una aparición puntual, se equivocaba, porque ella es la protagonista absoluta en solitario de las instantáneas.
La cuestión es que aunque parezca algo forzada, porque es una estética y un look que no le pegan nada a la buena de la señora Cruise, no se defiende del todo mal, eso sí, no sé que pensará su marido de estas poses tan sugerentes y provocativas (esa mirada…).
A mi desde luego al elección de Miuccia me sigue pareciendo genial, por desconcertante, por inseperada, y porque así Katie demuestra que no es esa niña cándida de Dawson’s Creek, sino una mujer muy sexy y contundente que no tiene nada que envidiarle a cuatro modelos escuálidas.
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