Los jóvenes en China han encontrado el equilibrio ideal entre estudio, trabajo y bienestar personal
En China, un país donde la competencia académica y laboral puede ser implacable, un fenómeno interesante está captando la atención: los estudiantes universitarios optan cada vez más por estudiar y trabajar en lugares poco convencionales, sin embargo, el apostar por cafeterías o bibliotecas públicas como destinos para concentrarse ya no forma parte de sus planes, sino que parques como Disney en Shanghai y hasta los karaokes se han convertido en alternativas que no sólo les permite ahorrar dinero, sino también son una forma de reducir el estrés asociado con la vida estudiantil.
Disney, conocido mundialmente por sus parques temáticos, no solo es un destino de ocio en China; también se ha transformado en un lugar acogedor para estudiantes, particularmente el parque de Disney en Shanghái que ofrece pases anuales que, a largo plazo, resultan más económicos que alquilar espacios en cafeterías o coworkings.
Con Wi-Fi gratuito, amplios espacios con aire acondicionado, y un ambiente que inspira creatividad, estos parques son ideales para quienes necesitan un lugar cómodo para estudiar. Además, la magia de Disney proporciona un entorno menos opresivo que las tradicionales bibliotecas universitarias, donde la competencia se siente en el ambiente.
Muchos estudiantes también trabajan a tiempo parcial en estos parques, combinando el trabajo con el estudio. Al desempeñar roles como guías, vendedores o actores de personajes, obtienen ingresos, beneficios como entradas gratuitas y un entorno de trabajo que perciben como menos tóxico que otros empleos temporales, lo que facilita la identificación de lugares en donde hay mejor cobertura de internet, menos gente en cierta hora determinada, o incluso precios especiales en alimentos y bebidas dentro del parque.
Entre las ventajas que los estudiantes han identificado de estudiar en parque de diversiones, no sólo está el hecho de que es un entorno mucho más agradable para trabajar o estudiar de forma remota, sino que también resulta mucho más barato: el costo promedio de un pase anual es de unos 193 dólares, mientras que, en las oficinas de coworking, los precios llegan a los 82 dólares al mes.
Disney Shanghái al servicio de la educación
El que los estudiantes elijan al parque de diversiones como destino para estudiar y divertirse a la vez quizá no sea una mera casualidad, ya que el centro de atracciones está comprometido con los estudiantes de su país: en 2019 abrió las puertas de sus atracciones a alumnos de nivel secundaria para que pudieran disfrutar de sus montañas rusas, pero no sólo eso, sino que, en un intento por promocionar las carreras técnicas, recibieron orientación sobre el uso de la física aplicada al diseño de los juegos mecánicos del parque.
Por si fuera poco, en 2018 el parque recibió la licencia de la Fundación Educativa de Próxima Generación de China para convertirse en la primera "Base Educativa de Experiencia Ecológica de China", que convierte a las áreas naturales de Disney Shanghái en espacios creativos para aprender sobre el medio ambiente.
Los karaokes: refugios nocturnos y económicos
Por otro lado, los karaokes, conocidos localmente como KTVs, también están ganando popularidad como espacios alternativos para estudiar. Aunque en Occidente se asocian exclusivamente con el entretenimiento a un público abierto como bares o restaurantes, en China, muchos karaokes ofrecen habitaciones privadas a precios sorprendentemente bajos durante las horas de menor actividad, especialmente por las mañanas.
Aunque al principio no tenga mucho sentido el estudiar en un espacio en donde hay mucha música y distracciones visuales, lo cierto es que los jóvenes en China han apostado por estos espacios, ya que, al estar aislados del ruido exterior de otras cabinas, son lugares silenciosos con sofás cómodos y que, en ocasiones, incluso ofrecen servicio de alimentos.
Por estas razones, los estudiantes aprovechan estas características para estudiar en un entorno relajado, con menos distracciones y en un ambiente donde ellos pueden controlar su ambiente de estudio a su entera disposición.
Definitivamente, la elección de lugares no convencionales como Disney y los karaokes refleja la creatividad y resiliencia de los estudiantes chinos frente a un sistema que les exige constantemente con alternativas que no solo desafían las normas tradicionales, sino que también muestran cómo los jóvenes están redefiniendo el equilibrio entre estudio, trabajo y bienestar personal.
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