No siempre la unión del talento de los más grandes profesionales de la moda da a luz resultados espectaculares. Pero eso no puede extrapolarse a la portada de noviembre de Vogue París. Unir al genio de la fotografía pictórica Mario Sorrenti, con la top Natasha Poly y el gusto estético de Carine Roitfeld ha dado como resultado una de las portadas más bellas y sugerentes de los últimos tiempos.
Reminiscencias hippies, un toque Pocahontas, y mucho Givenchy.
Como de costumbre la revista se adelanta a los tiempos y mientras estamos tiritando Carine nos muestra ya la estética de los desfiles de primavera-verano 2011, en concreto, como decía, la del desfile de Givenchy.
¿Lograrán con tanta anticipación que vayamos cogiéndole el gusto a esta estética?
Sitio Oficial | Vogue París