Once consejos y herramientas de los expertos que te pueden ayudar con la alergia (y dejar de temerle a la primavera)

Una alergia, tal y como explican desde el servicio de información de la Biblioteca Nacional de Medicina de EEUU, es una reacción del sistema inmunitario en defensa del cuerpo. Sin embargo, en la mayoría de los casos, esta reacción responde a una falsa alarma. Y es que se puede tener a algo tan bonito y esperado por muchos como es la primavera. Se estima que en España hay 8 millones de alérgicos al polen (gramíneas, árboles, hierbas/maleza etc.). Lo bueno es que suelen la mayoría de los síntomas sueñen ser estacionales y aparecer solo en los meses de abril, mayo y junio. No obstante, hay medidas que podemos tomar entonces para que este error de nuestro sistema no nos amargue la fiesta.

Si la congestión nasal y la tos; la picazón en ojos, oídos, nariz y garganta; entre otros síntomas, son sínónimo para ti de primavera, desde la Clínica Mayo te aconsejan, para empezar, cerrar las ventanas y utilizar el aire acondicionado durante la temporada de polen. Además, podemos filtrar el aire con un filtro de partículas pequeñas o un filtro HEPA y acomodarlo para que dirija el aire limpio hacia nuestra cabeza cuando dormimos.

Los expertos de los laboratorios Normon, por su lado, añaden a la lista realizar actividad física en recintos cerrados en lugar de al aire libre, especialmente en días de recuentos de polen elevado y de viento, así como antes y después de la lluvia. Asimismo, durante los viajes en coche, nos recuerdan no abrir las ventanillas.

No obstante, a la hora de salir a la calle, podemos utilizar gafas de sol en días de viento y evitar así el choque directo del polen contra los ojos. Para enfrentarse al exterior, también puede ser de gran utilidad conocer las horas de emisión de pólenes (5.00-10.00 h) y de descenso del polen desde la atmósfera (19.00-22.00 h). Esto también nos puede servir para saber cuándo es mejor que sequemos la ropa en el interior del hogar. Es decir, durante los días de recuento alto de pólenes.

Por último, Normon nos aconseja procurar no tener cerca la presencia de plantas, "ya que tienden a aumentar la humedad ambiental y su polen puede ser alergénico". Los expertos de Cigna también apuntan que, al llegar a casa, cambiemos la vestimenta para evitar dejar rastros de alérgenos por todos lados.

Además de los medicamentos como antihistamínicos o aerosoloes, que solo debe aconsejarnos un profesional médico o farmacéutico, se pueden llevar a cabo otras medidas higiénicas. Desde Normon nos hablan de la realización periódica de lavados nasales con una solución salina. "Esto ayudará a movilizar y expulsar el moco al tiempo que hidratará la mucosa nasal". 

También podemos hacer gárgaras para calmar el dolor de garganta. Y es que los productos farmacéuticos con agua de mar permiten eliminar los alérgenos, contaminantes, suciedad y polen; además de facilitar la limpieza nasal y una mejor penetración de los tratamientos utilizados por esta vía, en caso de tener que utilizarlos. 

Finalmente, si la pandemia todavía no te hubiera dado ya la idea, podemos usar una mascarilla contra el polen al realizar actividades al aire libre.

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