5 consejos infalibles para romper el orgasmetrónomo

¿Quieres vivir el sexo por todo lo alto? ¿Últimamente vuestras relaciones sexuales te recuerdan más a una excursión del INSERSO que aquellos memorables viajes al país de los orgasmos? No lo pienses más: organiza tu plan de vuelo y haz las maletas. MR. O te está esperando.[

]()

Bienvenida a nuestro vuelo de Orgasm Airways. El objetivo de este viaje es que descubras todas las posibilidades que te ofrece tu mente y cuerpo para mejorar la experiencia en el mundo de los orgasmos.

Existen muchos tipos de clímax y no hablamos de clitorianos, vaginales, múltiples o únicos, clasificación que ya ha quedado más que obsoleta. Nos referimos a esas diferentes tonalidades en las que puedes experimentar dicho clímax: rojo refulgente, dorado cegador o… todo un abanico cromático desplegado en 10, 15 o incluso 30 segundos de placer intenso.

La combinación de técnicas inspiradas en el sexo tántrico, en el deporte y en estudios sexológicos te pueden ayudar a potenciar ese momento de placer extremo tanto en calidad como en cantidad. ¿El objetivo de todas ellas? Que puedas sentir la descarga de placer más allá de la zona genital, desde las puntas de los pies hasta las raíces del cabello. En definitiva, lo que se viene llamando un “orgasmo expandido”.

1. Llena tus depósitos de tensión sexual.

Aunque el sexo rapidito puede desencadenar un orgasmo explosivo o una cadena de ellos, los expertos en el Tantra insisten en que demorar la culminación es la clave para disfrutar de una experiencia sexual única. ¡Ojo! Demorar no significa dormirse en los laureles; ya sabes que ellos no son de piedra ni tienen erecciones eternas.

En pareja. Intentad que la penetración sea pausada y cadenciosa, algo parecido a un sinuoso balanceo de vuestras caderas. Probad a hacer un pequeño parón de pocos segundos sin romper la conexión de vuestros cuerpos y volved a acelerar el ritmo. Durante este intermedio, abrid vuestros sentidos. Siente sus caricias, vuestros labios rozándose, tus gemidos acariciando tu oído, su cálido aliento contra tu cuello… El sexo como un TODO es el mejor afrodisiaco.

2. Inspira su orgasmo y exhala el suyo.

Cuando alcanzamos el pico más alto del orgasmo nuestra respuesta automática es contener la respiración. Según Barbara Carrellas, coach sexual y autora de ‘Tantra urbano: sexo sagrado para el siglo XXI’, “puedes sentir el placer de una manera más profunda si inhalas y exhalas hondo”. Como no es una tarea sencilla y mucho menos metidas en faena, es recomendable que practiques la respiración abdominal durante tus rutinas diarias.

En pareja. Elegid la postura sexual del Ying & Yang (ambos sentados frente a frente y tú sobre su regazo) y envuelve a tu chico con brazos y piernas. Miraos a los ojos e intentad acompasar vuestras respiraciones. Importante: no reprimas tus jadeos por mucho miedo que te den tus vecinos. Los “ruiditos” que hacemos durante el sexo es un fantástico potenciador del sabor orgásmico.

3. La postura sexual ideal… “LA TIJERA”.

Como ya sabrás, la postura conocida como “la amazona” (él tumbado bocarriba y tú cabalgándole cara a cara) facilita el orgasmo femenino. Pero si queremos darle ese subidón de intensidad al orgasmo, te recomendamos una pequeña variación.

En pareja. Para una buena posición “tijera”, tu chico tiene que recostarse por completo en la cama y tú sentarte a horcajadas sobre él, pero de espaldas a su cara. A continuación, le pides que flexione una pierna e inclinas tu cuerpo hacia ella para que tu clítoris y su muslo entren en contacto mientras le cabalgas.

4. El placer está al alcance de tus manos.

En muchas ocasiones (especialmente, con parejas estables) tendemos a dejar nuestro placer en manos del otro, es decir, confiamos en que él va a saber dónde y cómo debe tocarnos para procurarnos un mayor placer. Error. Si quieres potenciar tus orgasmos tienes que hacerte dueña y señora de ellos.

En pareja. Durante el sexo oral, gozarás de un orgasmo más intenso si eres tú la que se coloca encima de su rostro y marca el ritmo a su lengua traviesa (eso sí, por muy glotón que sea tu chico, no olvides que necesita oxígeno para vivir). Y en cuanto al momento coital, también puedes liberarle de responsabilidades, y acariciarte a ti misma mientras él te penetra. La doble estimulación (vaginal y clitoriana) y la masturbación son la triada perfecta para gozar de un súper orgasmo.

5. Ejercita tu vagina.

Sí, has leído bien: toca clase de vagina-training. Inevitablemente, para gozar de magníficos orgasmos es fundamental: primero, que nuestro suelo pélvico tenga un buen tono; y segundo, que seas capaz de contraer y relajar los músculos vaginales voluntariamente. Si estás algo “desentrenada”, utiliza una pesa vaginal dos o tres veces por semana (por ej., durante la ducha). Otra opción es que practiques ejercicios específicos para el músculo transverso del abdomen.

En pareja. Durante la penetración y de manera voluntaria, contrae y relaja las paredes de la vagina rítmicamente como si quisieras succionar su pene. Gracias a esos movimientos espasmódicos y vibrantes, la sensación de placer y fricción será más intensa para ambos y el pistoletazo de salida para un orgasmo fulminante.

Si quieres más información para fortalecer tu suelo pélvico, echa un vistazo a este tutorial:

Fotos: Pixabay.com, Intima, Fisioterapia Online.com.

En Trendencias| El amor es maravilloso… tanto como estas ilustraciones.