La desbordada pasión de la temporada ha mandado ya a varias personas que la practican al hospital
Cuando llega la navidad, las emociones se desatan a flor de piel, tanto, que es imposible el poderse resistir a tener un encuentro sexual con nuestras parejas para dejarnos llevar por el espíritu festivo, y, hay que decirlo como es, también por el alcohol y las pasiones, sin embargo, como en todo tipo de actividad sexual relacionada con un evento específico del año, la advertencia de precaución al tener sexo esta navidad es tener cuidado de practicar una posición que ha mandado al hospital a muchos hombres.
Aunque sabemos que hay una gran diversidad de prácticas y posiciones que buscan intensificar el placer y la conexión entre las parejas, algunas posiciones sexuales pueden conllevar riesgos físicos, y la vaquera invertida es una de las que se encuentra más asociada a un tipo específico de lesión masculina: la fractura de pene.
Este fenómeno, aunque raro, es real y potencialmente doloroso. Además, curiosamente, estudios sugieren un aumento en la incidencia de esta lesión durante las festividades navideñas.
La fractura de pene ocurre cuando los cuerpos cavernosos del órgano masculino, estructuras cilíndricas responsables de la erección, sufren un desgarro debido a una fuerza traumática. Aunque el pene no contiene huesos, el término "fractura" se utiliza para describir este desgarro del tejido fibroso.
"Un riesgo es que en el momento del coito al salirse el pene puedes hacer un choque brusco con la otra parte del cuerpo de la pareja (como los glúteos). Por ejemplo: si se hace un mal movimiento, se sale el pene y en vez de meterlo a la vagina, se hace un choque que puede generarle una fractura al pene", comenta la sexóloga Eirelyn Gómez para La República.
Esta lesión suele ir acompañada de un sonido característico de "chasquido", dolor intenso, hinchazón inmediata y, en ocasiones, deformidad. Es una emergencia médica que requiere tratamiento quirúrgico inmediato para evitar complicaciones a largo plazo, como disfunción eréctil o curvatura anormal.
¿Por qué la vaquera invertida aumenta el riesgo?
La posición de la vaquera invertida implica que la persona receptora penetre desde arriba mientras está de espaldas a su pareja. Aunque puede ser estimulante por su control sobre la profundidad y ritmo, esta posición conlleva riesgos porque la persona receptora ejerce presión descendente: si ocurre un movimiento descoordinado o el pene sale parcialmente y es reintroducido en un ángulo incorrecto y la fuerza puede provocar una flexión forzada del pene erecto, aumentando el riesgo de desgarro.
Además, en esta posición, el hombre tiene menos capacidad de controlar los movimientos y corregir posibles errores en tiempo real, dejándolo más vulnerable a impactos traumáticos. Y, por si fuera poco, el cambio en la orientación del cuerpo y el ángulo de penetración pueden generar puntos de estrés poco comunes en el pene erecto, aumentando las probabilidades de lesiones.
¿Por qué es más común en Navidad?
Aunque puede parecer un dato anecdótico, diversos estudios y reportes médicos han señalado un aumento en los casos de fractura de pene durante las festividades navideñas.
De acuerdo a un estudio publicado por el British Journal of Urology International, "la Navidad podría ser un factor de riesgo de fracturas de pene debido al espíritu navideño relacionado con la intimidad y la euforia de los días festivos".
De acuerdo a la investigación, las fracturas de pene eran más comunes durante la víspera de año nuevo, y el riesgo aumentaba los fines de semana y durante las vacaciones de verano, afirmó el Dr. Nikolaos Pyrgides, urólogo de la Universidad Ludwig Maximilian de Munich, quien dirigió el estudio: "Si cada día fuera como Navidad, a partir de 2005 se habrían producido en Alemania un 43% más de fracturas de pene".
Entre las explicaciones posibles que dan paso a este tipo de incidencias, está el hecho de que, durante la Navidad, las parejas suelen tener más tiempo libre, mayor intimidad y menos estrés laboral, lo que puede llevar a un aumento en la frecuencia de las relaciones sexuales.
También, las celebraciones navideñas están frecuentemente acompañadas de consumo de bebidas alcohólicas, lo que puede afectar la coordinación motriz y aumentar el riesgo de movimientos bruscos o descoordinados durante el acto sexual, sobre todo cuando se practican posiciones que no dominan del todo.
La posición de la vaquera invertida puede ser emocionante, pero como cualquier otra práctica sexual, debe realizarse con cuidado y conocimiento de los riesgos. La Navidad, con su mezcla de relajación, entusiasmo y consumo de alcohol, puede aumentar la probabilidad de lesiones si no se tiene precaución.
Recuerda que la seguridad y el placer no son mutuamente excluyentes; ambos pueden coexistir si hay comunicación y respeto mutuo en la intimidad.
Foto de Nick Karvounis en Unsplash
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