Mucho se habla, y mucho se escribe, sobre el tamaño del pene, pero... ¿y qué pasa con la forma? Penes hay tantos como hombres, de la misma manera que no hay dos pechos iguales entre nosotras, las mujeres, pero puestos a hacer una clasificación hay cinco grandes tipologías de penes, entre las que se encuentra la seta, el lápiz...
Los cinco “clásicos”
Si hubiera que hacer una clasificación así como muy global, estas cinco serían las finalistas sin duda:
El lápiz
- Descripción: se trata de un pene fino y alargado, recto (es decir, con el mismo grosor, o similar, tanto en la base como en la punta).
- También conocida como: la flauta o la regla.
- Para disfrutar más prueba con: al ser fino, posturas en las que cerramos las piernas y “aprisionamos” el pene suelen ser más placenteras, por ejemplo, tumbada boca abajo, con las piernas cerradas y él encima, penetrando desde atrás. Además como suele ser larga, permite “más ángulo de movimiento”.
El cono
- Descripción: como su propio nombre indica, se trata de un pene que va de más gordito a menos, es decir, tiene más grosor en la base que en el glande, donde se afina significativamente.
- Para disfrutar más prueba con: este pene suele considerarse como el perfecto candidato para iniciarse en el sexo anal dado que el glande es más fino que la base, de manera que favorece la penetración así de inicio, que es lo que suele costar más a algunas personas. Su base de diámetro superior la hace ideal para penetraciones profundas, como la que se logra a través de la conocida “postura del perrito".
perrito”.
El pene curvo
- Descripción: como su propio nombre indica, se trata de un pene no recto sino curvado. “El punto de fuga” puede ser hacia arriba, hacia un lado o hacia abajo. Este arco puede ser estupendo para estimular la zona que mencionaba antes, ubicada en la pared frontal de la vagina (punto G).
- También conocido como: la cimitarra, un arma que, como dicen en Forjado a fuego, sin duda “mata”... pero de placer.
- Para disfrutar más prueba con: si la curvatura es hacia arriba, la postura del misionero es la tuya. En el caso de que la curvatura sea hacia abajo, la postura del perrito puede proporcionarte un placer ma-ra-vi-llo-so. Y si es hacia un lado, la cucharita con giro (él tumbado de lado y tú boca arriba con tus piernas sobre su cuerpo, apoyando tu trasero sobre su barriga y pene, claro) hará que llegue con el glande a la zona G. Bravo.
Que el pene tenga curvatura es algo de lo más habitual, sin embargo debemos distinguir penes curvados y lo que se conoce como la enfermedad de la Peyronie.
La enfermedad de la Peyronie se suele producir por un golpe brusco y potente, como una patada en la zona, un balonazo o un movimiento brusco durante la penetración, que lleva a que los cuerpos cavernosos que conforman el pene tengan microroturas.
En ocasiones el tejido cicatrizal es rígido y hace que cuando el pene entra en erección no esté recto, sino que se curve de ese lado en el que está la cicatriz rígida. Además suelen ser erecciones dolorosas.
Si crees que te sucede algo así, o a tu chico, acudid a un especialista porque, aunque en ocasiones es algo que mejora por sí mismo, puede ir a peor y causar, además del dolor per se, un problema de erección secundario (por la anticipación de ese dolor).
La seta
- Descripción: este tipo de pene es recto desde la base, pero cuenta con un glande grande.
- También conocida como: la flecha o el faro.
- Para disfrutar más prueba con: el buen tamaño del glande lo hace ideal para estimular la pared frontal de la vagina, zona de gran sensibilidad para muchas mujeres (es donde se ubica el popularmente conocido como Punto G, que en realidad es esto, una zona sensible). Para ello la postura del misionero o la de amazona, en la que la chica pueda con sus manos presionar la zona baja de su abdomen para favorecer el roce interior del pene con esa zona, harán las delicias de quien las practique.
El plátano
- Descripción: se trata de un pene más fino en la base, que adquiere mayor grosor en la zona media y que se vuelve a estrechar en la punta o glande, que además presenta cierta curvatura.
- Para disfrutar más prueba con: este tipo de pene es considerado un poco “el comodín” ya que “vale para todo”. No es que lo demás no, ojo.
Da igual la forma
Penes hay de muchas formas y tamaños, rectos, curvos, gordos, finos... y todos son estupendos para disfrutar del sexo. Porque da igual la forma, da igual el grosor, no es eso lo que determina nuestro placer.
No hay un pene ideal para nuestra vagina, uno que encaje exclusiva y perfectamente en nosotras, y solo en nosotras, como el zapato de cristal en Cenicienta.
Lo hemos dicho mil veces y volvemos a decirlo: el sexo es algo más que penetración, de manera que la forma del pene no es la que va a condicionar que nos lo pasemos bien o no. La actitud, las ganas, la complicidad, y la maña, sí que marcarán la diferencia.
Así que más allá de la curiosidad, de lo anecdótico de las formas y tipos de penes, está el placer juntos, y todas esas -infinitas- vías para disfrutar. ¡Aprovéchalas!
Fotos | Unsplash.com
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 1 Comentario